Líder islámico se inmoló durante incursión dirigida por Biden y EEUU dice que fue cobarde
El portavoz del Pentágono, John Kirby, explicó que los soldados de EEUU lograron salvar a 10 personas antes de la inmolación del líder islámico
Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi, líder del Estado Islámico -ligado a Al Qaeda- se inmoló durante la incursión armada de EEUU en Siria el 3 de febrero, dirigida por Joe Biden, con el fin de dar muerte a esta persona. El hombre, al ver que los soldados estadounidenses llegaban a su escondite en la provincia siria de Idilib, accionó una bomba que acabó con su vida y la de su familia.
La explosión fue tan fuerte en la tercera planta de la casa, donde se encontraba el cabecilla islámico, «que envió los cuerpos fuera de la casa».
Biden dijo apenas ocurrió el ataque que las fuerzas militares de EEUU «llevaron a cabo con éxito una operación antiterrorista (…) gracias a la habilidad y valentía de nuestras Fuerzas Armadas, logramos retirar del campo de batalla a Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi».
Enfatizó el mandatario estadounidense que se hizo un esfuerzo para que se tomaran las precauciones posibles con el fin de minimizar las bajas civiles en la incursión y por eso es que habían optado a hacer un operativo en tierra y no por aire.
«Nuestro equipo todavía está compilando el informe. Pero sabemos que a medida que nuestras tropas se acercan para capturar al terrorista, en un acto final de cobardía desesperada, él no tiene en cuenta las vidas de su propia familia u otras personas en el edificio. Eligió hacer estallar no solo el chaleco sino hacer estallar ese tercer piso, en lugar de enfrentarse a la justicia por los crímenes que ha cometido», indicó Biden.
Un lugarteniente de Al Qurashi y su esposa sobrevivieron al estallido y se enfrentaron a los efectivos estadounidenses en un tiroteo desde el segundo piso del edificio. Finalmente, murieron.
Según testigos del operativo, unos 50 soldados aterrizaron en cuatro helicópteros y atacaron la casa controlada por los rebeldes. Las fuerzas especiales y los rebeldes se enfrentaron durante dos horas. Los disparos y cohetes sacudieron la ciudad, situada en un área con campamentos de refugiados de la guerra en Siria.
Posteriormente, el portavoz del Pentágono, John Kirby, indicó que los soldados estadounidenses pidieron en varias ocasiones que se dejara en libertad a los civiles que estaban con el líder islámico en la estructura de tres pisos. Sin embargo, destacó que se logró salvar a más de 10 mujeres, niños y bebés.
Con información de VOA / La Vanguardia