Los adultos mayores asistieron «sin miedo» a votar en las elecciones primarias
El inicio de las elecciones primarias de 2023 en Caracas estuvo marcado por el retraso en la apertura de centros, amedrentamiento de simpatizantes del gobierno y lluvias constantes. A pesar de todo, las personas se mantuvieron en las filas para ejerer su derecho al voto
Con cédula en mano y mucha incertidumbre, los adultos mayores asistieron muy temprano a los centros electorales en Caracas para ejercer su derecho al voto en las elecciones primarias de la oposición 2023.
Este 22 de octubre las personas se aglomeraron en sus centros correspondientes desde antes de las 7:00 am. Fue el caso del centro de votación ubicado en la plaza Brión de Chacaíto donde se nucleó los centros de votación habituales de parroquias como el 23 de Enero, Catedral, Santa Teresa y El Recreo. Es el centro de votación más grande que la Comisión Nacional de Primaria estableció en la capital y cuenta con un registro electoral de 70.000 personas.
En ese centro, los adultos mayores representaron el grupo etario que más participó en esta jornada electoral. Algunos estaban formados desde las 6:00 am para ser los primeros en votar. Otros se llevaron sus sillas y sombrillas para esperar en la fila.
Esta tendencia se repitió en varios de los centros de votación en el municipio Libertador. Algunos, en conversación con TalCual, ratificaron su compromiso con el voto como la única vía para el cambio político en Venezuela.
En la plaza Brión la fila de la parroquia 23 de Enero, históricamente vinculada al chavismo y que aglomera grupos colectivos, era la más larga. Además, la mayor cantidad de personas eran de la tercera edad.
*Lea también: Interés ciudadano y retrasos en mesas caracterizaron el inicio de la jornada de primarias
«Queremos y tenemos que salir de este gobierno. Para eso comenzamos con este pasito. Este es el sentir del pueblo. A algunos les dará miedo pero a esta altura de mi vida qué miedo voy a tener yo», dijo una habitante de la parroquia 23 de Enero de 70 años de edad mientras estaba formada en su respectiva fila para votar.
En ese mismo centro de votación otra mujer de la tercera edad esperaba sentada en una silla que iniciara el proceso de votación. No solo iba a votar, sino que también era miembro de mesa.
«Necesitamos un cambio y la manera más correcta de obtener ese cambio es esta, a través de la votación», dijo una miembro de mesa.
Algunos de los votantes de la tercera edad acudieron solos, otros estuvieron acompañados de sus hijos o familiares. Ejemplo de ello fue el centro de votación ubicado en la avenida María Teresa Toro en Las Acacias.
El primer votante en este centro de votación fue un señor de la tercera edad quien, con bastón en mano y apoyo para caminar, ejerció su derecho al voto en las elecciones primarias. Aunque sí hubo, la presencia de jóvenes en ese proceso electoral fue mucho menor.
Otra pareja de personas mayores, tomados de la mano, se guíaban mutuamente para llegar a su mesa de votación. En este centro los coordinadores y miembros de mesa priorizaron a las personas de la tercera edad que estaban en la fila esperando para votar.
En el colegio San José de Tarbes, en la Alta Florida de Caracas, los adultos mayores mostraron su compromiso con el voto. De hecho, el 90% de los votantes en este centro electoral eran adultos mayores.
En la avenida Intercomunal de El Valle, otro de los centros de votación en el municipio Libertador, también hubo gran cantidad de personas mayores que esperaban votar. La fila ocupaba más de una cuadra en la calle 11 a las 11:00 am. Esta tendencia se repitió en otras zonas de Caracas como Catia y la parroquia San Juan. Ocurrió lo mismo en otros municipios como en Chacao y Baruta.
Nadie salió de la fila
A pesar de la lluvia y los retrasos en los centros de votación, las personas mayores y el resto de los votantes se mantuvieron en las filas esperando para ejercer su derecho al voto.
En el municipio Libertador llovió durante algunos minutos. Los ciudadanos que esperaban para votar en la esquina El Muerto, en la parroquia Santa Rosalía, no se movieron de la fila a pesar de la lluvia. De hecho, una hora después grupos afines a la administración de Nicolás Maduro arrojaron una bomba lacrimógena para dispersar a los votantes.
Muchas personas se mostraron afectadas por el gas lacrimógeno y una mujer de la tercera edad se desmayó. Sin embargo, a los pocos minutos los organizadores reactivaron el centro electoral y las personas ocuparon su lugar en la fila. En San Martín, parroquia San Juan, denunciaron que un grupo de personas dispararon para dispersar a las personas. Sin embargo, las personas no se retiraron del centro de votación.