Madres de adolescentes detenidos solicitan apoyo a Unicef Venezuela para su liberación
Las madres y representantes de los adolescentes detenidos, que fueron recibidos por un delegado de Unicef, solicitaron que no solo aboguen por su libertad inmediata, sino que realicen una evaluación «independiente y directa» a estos jóvenes y se garantice su atención médica y psicológica
Un grupo de madres de adolescentes detenidos por las protestas poselectorales solicitaron al Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Venezuela que apoye para lograr la liberación de al menos 70 jóvenes, así como una evaluación independiente en los centros de reclusión.
«Es el momento de actuar para lograr preservar la vida de estos niños, niñas y adolescentes en Venezuela, que llevan casi tres meses de injusta prisión. Confiamos en que Unicef puede y debe ser un faro de esperanza en medio de esta adversidad», se lee en parte del documento entregado este lunes 21 en Caracas.
Las madres y representantes de los adolescentes detenidos, que fueron recibidos por un delegado de Unicef, solicitaron que no solo aboguen por su libertad inmediata, sino que realicen una evaluación «independiente y directa» a estos jóvenes de forma física y mental y se garantice su atención médica y psicológica.
«Deben implementarse medidas de asistencia integral que les proporcionen apoyo especializado, no sólo en el ámbito de la salud, sino también en su rehabilitación emocional, considerando los efectos traumáticos de su detención arbitraria», señalaron.
Nérida Ruíz es madre de Ángel Moisés Ramírez Ruíz, un adolescente que el jueves 24 de octubre cumplirá 17 años de edad. El joven fue pasado a juicio la semana pasada por los presuntos delitos de terrorismo, incitación del odio, resistencia a la autoridad y hurto calificado.
«Pedimos que por favor se aboquen y ayuden con la libertad de nuestros hijos. En el caso de mi hijo estudia sexto año de contabilidad y una de sus preocupaciones es regresar a clases. Está un poco triste luego de que pasó a juicio, él esperaba salir en libertad», comentó Ruíz.
Seis de los ocho adolescentes recluidos en la Unidad de Atención Ciudad Caracas, ubicada en El Cementerio, ya han pasado a juicio por delitos similares. Ahora esperan a que la defensora les comunique cuándo iniciarán las audiencias de juicio.
Por su parte Katherine Martínez, madre de la adolescente Irene Corrado, pidió al gobernante Nicolás Maduro y al resto de las autoridades «que tengan piedad de estos niños. Usted es padre, usted sabe que los agarraron en condiciones de que no estaban haciendo nada malo en su mayoría, y aunque hayan estado haciendo algo, ese no es el castigo señor presidente».
Irene, de 17 años, fue apresada el pasado 4 de agosto cuando acompañó a su madre a una citación judicial. Su padre fue llamado a una comandancia por presuntas amenazas contra una persona por medio de un chat de WhatsApp «opositor». Pero al tratar de irse, los policías le dijeron que la joven se quedaba detenida porque se comprobó que ella era quien pertenecía a ese chat.
La modelo, que esperaba ingresar a estudiar Derecho en septiembre, fue pasada a juicio por presunta incitación al odio y permanece recluida en el Cicpc Las Acacias, en Valencia. «Estaba tranquila, cuando le hicieron la preliminar eso la tumbó porque ella esperaba salir porque es inocente. No hay nada que los culpe, no te muestran nada que los incrimine excepto esa supuesta acusación. Ahora sí está desesperada con ataques de pánico», señaló su madre.
En el documento también se pusieron de manifiesto los casos de José, un joven detenido en una moto sin papeles, que sufre de convulsiones y fue golpeado al momento de su detención; el de la joven Lauriannys Cedeño, de 17 años, detenida en Carúpano (estado Sucre) por reenviar un mensaje de rechazo a los resultados de las elecciones presidenciales y que sufrió un colapso nervioso que le dejó daños cerebrales; o el de Aliangel Rodríguez, de 15 años, detenido durante las protestas y que intentó suicidarse estando recluido tras enterarse de los pases a juicio.