Maduro arreció persecución a militares disidentes iniciada por Chávez
En 2018, el Gobierno ha apresado a 71% de los 163 miembros de la FAN acusados por conspirar desde que el Jefe del Estado llegó al poder
Desde que Nicolás Maduro ascendió al poder, 163 militares ha sido detenidos por razones políticas. 116 de los uniformados, equivalente a 71%, fue apresado en 2018. Este dato revela que el gobernante aumentó la persecución contra los miembros de la FAN que inició el fallecido presidente Hugo Chávez.
Según la Coalición por los Derechos Humanos y la Democracia, la cifra sobrepasa a los militares que estuvieron tras las rejas durante la dictadura del General Marcos Pérez Jiménez y en la gestión de Hugo Chávez: 197. Al mismo tiempo, se acerca al número de civiles presos por motivos políticos. La Fundación para el Debido Proceso reportó que, en los 14 años del gobierno de Chávez, hubo 31 militares presos.
La lista de delitos imputados a los uniformados suele ser estándar: Instigación a la rebelión, traición a la patria y faltas contra el decoro militar. Además del Centro Nacional de Procesados Militares de Ramo Verde, los militares perseguidos permanecen recluidos en La Pica, Santa Ana, Fuerte Tiuna, Dirección General de Contrainteligencia Militar-Boleíta y El Helicoide. Estos datos forman fueron reflejados en un trabajo realizado por “Crónica Uno”, y publicado este domingo 18 de noviembre en “El Nacional”.
Jackeline Sandoval, directora de Fundepro, enfatizó que “Chávez fue selectivo en sus detenciones, tanto de militares como de civiles. Sus detenciones eran emblemáticas y transmitían un mensaje específico: instigar el miedo. En el caso de los militares, en su mayoría, fueron de alto rango. Como para decir: ‘Si lo meto preso a él, imagínense que quedará para el resto’. Esto no ocurre con Maduro. En el presente se aplica la política de ‘te detengo y luego veo quién eres”.
El abogado Alonso Medina Roa, miembro de la Coalición por la Democracia y los Derechos Humanos, afirmó que “lo que estamos viviendo es una ofensa a la estructura del derecho penal. De hecho, estamos presenciando un uso abusivo del derecho penal. Se ha configurado una exageración de su uso para sancionar a aquellos que han manifestado su inconformidad a la intromisión política en los cuarteles”.
Parte del descontento castrense es atribuido a que la crisis del país alcanzó a los cuarteles, aseguraron familiares de los militares detenidos por Maduro. “Yo tampoco consigo carne, pollo, huevos”, dice Yocelyn Carrizales, esposa del teniente Coronel Inbert Marín Chaparro. El oficial, número uno de la Promoción que egresó del Ejército en 1999, era el Comandante del Batallón Ayala cuando fue apresado en marzo de este año y acusado de una presunta conspiración. Este batallón es uno de las unidades con mayor poder de fuego dentro de la FAN.
Carrizales agregó que “al disentir de algo, corres un riesgo. Esto no debe ser así. En todos sus discursos Inbert incluía a figuras como Simón Bolívar o a héroes de la Segunda Guerra Mundial. Nunca los politizó y quizás eso generó un descontento entre sus superiores. Hay miedo, y ahora mucho más, ya que la persecución va creciendo”.
Los familiares de algunos de los oficiales detenidos en marzo de este año denuncian tratos crueles. Refieren que cuando fueron presentados al Tribunal Supremo de Control para la audiencia de presentación todos tenían heridas físicas. “Le echaban el polvo del gas lacrimógeno por las fosas nasales y en los ojos y luego le colocaban un pasamontañas para taparle toda la cara”, cuenta Ana Raquel de Soto, esposa del teniente Coronel Víctor Soto.
Al comandante del Destacamento de Seguridad Urbana en Petare, Abraham Suárez , de la GNB, detenido el 21 de mayo de este año, lo colgaron por dos días, posición en la que tuvo que hacer sus necesidades fisiológicas; también le partieron la nariz, le golpearon las costillas, y le dieron tablazos en los glúteos al punto de que se le formó una celulitis, aseguró su esposa,Ysmenia Cedeño.