Maduro celebra control de casos de difteria que surgieron bajo su Gobierno
En las últimas semanas se han reportado diversos casos de muertes en centros hospitalarios por escasez de medicinas, a pesar de que la ayuda humanitaria que gestionó el gobierno de Nicolás Maduro ingresó hace más de un mes
Durante una «jornada de salud» celebrada en una de las cadenas nacionales -prácticamente diarias- de Nicolás Maduro, el mandatario celebró haber cumplido tres semanas sin que se registrara ningún caso de difteria y sarampión, ambas patologías que reaparecieron en su Gobierno tras permanecer bajo control durante décadas.
«Hemos conseguido la disminución de un 91% de los casos de sarampión en el país. Además de 89% de los casos de difteria. Tenemos tres semanas sin que se presente ningún caso», afirmó.
Maduro no se había pronunciado previamente sobre los brotes de difteria y sarampión registrados en Venezuela desde 2016 y alertados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Ahora los menciona para celebrar que su Gobierno trabajó para controlar la situación.
En una jornada llena de anuncios relacionados con el sector salud, Maduro decidió extender la Jornada de Vacunación de Las Américas, que se desarrolla desde el 13 de mayo y cuyo cierre se estimaba este 9 de junio, hasta el 30 del presente mes.
Por otra parte, informó sobre la creación de un nuevo Centro de Imagenología en la Ciudad Hospitalaria Doctor Enrique Tejera, en Carabobo.
De acuerdo con el gobernador de la entidad, Rafael Lacava, quien ofreció detalles sobre los equipos estrenados, el complejo cuenta con cuatro módulos de rayos X y «equipos de última generación» para realizar resonancias magnéticas, mamografías digitales, entre otros procedimientos médicos.
Aseveró que en la Ciudad Hospitalaria Doctor Enrique Tejera podrían gestionar hasta 100 trasplantes de médula ósea al año por un precio de 30.000 dólares, frente a los 200.000 que supuestamente costaría el tratamiento completo en el mercado internacional.
En este sentido, indicó que se haría para combatir el presunto «bloqueo» que les impide atender las solicitudes de trasplante de médula ósea de los pacientes del Hospital J.M. de los Ríos. Sin embargo, olvidó mencionar la justificación del discurso oficialista, y es que estas operaciones no se habrían realizado al no poseer donantes en Venezuela.
«Podemos llegar a muchas más personas con la mejor atención e índices de supervivencia altísimos, que superan el 75%», aclamaba Lacava.
Por otra parte, en un pase a la ciudad de Maracay, el gobernador Rodolfo Marcos Torres vociferaba la creación de una nueva Sala de Emergencia Pediátrica en el Hospital Central de Maracay.
Se atrevió a asegurar que, con sus 29 camas, se trataba de una de las «mejores emergencias pediátricas de Venezuela y el mundo», a pesar de que las imágenes mostraban equipos poco actualizados y una habitación precaria al comparar con otras salas que cumplen con la misma función en el extranjero.
Tras otro pase a Barlovento, en el que el gobernador Héctor Rodríguez no ofreció información relevante más allá que hablar de los avances del plan de vacunación, Maduro cerró la transmisión con el adelanto de que mañana Venezuela firmará compromisos en materia de salud.
«Mañana firmaremos, en San Petersburgo un acuerdo de producción conjunta de Insulina. Produciremos la insulina en Venezuela, tenemos que lograrlo», señaló para luego denunciar los supuestos bloqueos que impiden la importación de medicamentos y materias primas para roducirlos.
También destacó que se firmará un acuerdo entre el ministerio de la Salud y la Federación Oficial de la Cruz Roja y Media Luna Roja, «para que aceleren e incrementen el apoyo humanitario en materia de salud y medicinas».
En las últimas semanas se han reportado diversos casos de muertes en centros hospitalarios por escasez de medicinas, a pesar de que la ayuda humanitaria que gestionó el gobierno de Nicolás Maduro ingresó hace más de un mes.