Maduro exige reconocimiento y devolución de cuentas bancarias para negociar con Guaidó
Los términos del oficialismo para dialogar exigen a la oposición reconocer los poderes públicos controlados por el chavismo, además de entregar el control de cuentas bancarias, Citgo y Monómeros a la administración de Maduro
El mandatario Nicolás Maduro se refirió una vez más a la nueva oportunidad de diálogo con la oposición que ha surgido en la última semana, pero condicionó las negociaciones públicamente con una agenda que exige reconocimiento y dinero.
La exigencia del chavismo para entablar negociaciones con la oposición pasa por que el gobierno interino encabezado por Juan Guaidó reconozca a las instituciones controladas por el chavismo como poderes públicos establecidos, y ceda a la administración de Maduro las cuentas bancarias bloqueadas por Estados Unidos, además de las estatales Citgo y Monómeros.
«El primer punto es que la oposición extremista renuncie al camino del golpismo y que reconozca la Constitución y los poderes establecidos; y el segundo punto es que rindan cuentas de todos los recursos y regresen todas las cuentas bancarias, Citgo y Monómeros, a manos de instituciones venezolanas», exclamó.
El líder del chavismo se enfocaría en recuperar el terreno perdido ante la administración interina de Guaidó en el plano internacional, pues bajo el reconocimiento de la comunidad internacional, el presidente de la Asamblea Nacional (AN) electa en 2015 logró despojar al chavismo y sus instituciones de cuentas en Estados Unidos y otros países.
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De igual forma, desde el parlamento controlado por la oposición y reconocido internacionalmente, se designaron las juntas directivas para la filial de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) en Estados Unidos, Citgo; y la filial de Pequiven en Colombia, Monómeros Colombo Venezolanos.
Maduro catalogó a la mayoría opositora liderada por Guaidó de «ultraderecha extremista» y la acusó de robar dinero del país, organizar invasiones y golpes de Estado en contra del país, para luego reiterar que estaba de acuerdo con un diálogo según sus términos y su agenda.
«La derecha extremista que pretendió de manera tragicómica asumir de facto el poder político con apoyo de potencias imperialistas y no pudo, ahora dice que quiere sentarse a hablar. Estoy de acuerdo y estoy haciendo la agenda de los puntos que vamos a llevar al diálogo», subrayó.
Maduro se ufana
A pesar de que no se trata de la primera negociación que entablarían, ya que establecieron conversación al menos tres veces en el pasado (2014, 2018 y 2019) que no llegaron a buen puerto, el mandamás del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) se atribuyó como una «victoria» el arrinconar a la oposición hasta el punto en el que deban aceptar un diálogo.
«Los fuimos llevando y ahora ellos, desesperados por su derrota y aislamiento, al final reconocen que tienen que hablar con la fuerza gobernante y mayoritaria de Venezuela, que son el Gran Polo Patriótico y el presidente Nicolás Maduro. Estamos dispuestos a dialogar por el futuro del país, por la paz», insistió.
También destacó que está dispuesto a aceptar cualquier tipo de mediación y país, ya que diversos actores internacionales se han expresado en apoyo a las negociaciones, como la Unión Europea que incluso defendió los contactos preliminares entre el diputado de la AN electa en 2015, Freddy Guevara, y el parlamentario de la AN chavista, Francisco Torrealba.
«¿Quiéren hablar? Yo quiero hablar. Que venga la Unión Europea, Estados Unidos, Noruega, el Grupo Internacional de Contacto, que vengan los que quieran venir ¿En Venezuela? Hablamos ¿En otro país? Hablamos», aseveró.