Maduro se juramentó ante el TSJ a pesar de críticas sobre su legitimidad
Recordó que el 20 de mayo de 2018, Maduro fue reelecto gracias a que «el pueblo hizo uso de las herramientas del voto, usando el sufragio»
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, se juramentó el 10 de enero ante el Tribunal Supremo de Justicia para asumir un segundo mandato, en el que se prevé que estará al frente del país hasta el año 2025.
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno, le tomó el juramento debido a que esa instancia considera que la Asamblea Nacional -órgano que debe hacer el mismo- está en «desacato».
Luego de la pompa con la que fueron recibidos los presidentes y representantes de al menos 25 países, Moreno leyó un discurso en el que aseguró que el Poder Judicial «tiene el deber de garantizar la estabilidad del país», así como preservar el «funcionamiento» de todas las instituciones a través del estado de derecho.
Recordó que el 20 de mayo de 2018, Maduro fue reelecto gracias a que «el pueblo hizo uso de las herramientas del voto, usando el sufragio para derrotar las pretensiones de quienes insisten en sumergir el país en anarquía».
A través del artículo 231 de la Constitución, justificó ante los invitados internacionales que el acto se llevara a cabo en el TSJ y no en la Asamblea Nacional, donde naturalmente se debe realizar.
Subrayó que en varias sentencias, el Poder Judicial ha declarado varias veces que la Asamblea Nacional se encuentra en «desacato» desde 2016, debido a las supuestas irregularidades registradas durante las elecciones en el estado Amazonas y que el Parlamento obvió al proclamar e incorporar a los diputados de esa entidad a la Plenaria.
A pesar de que se decretó una «continuidad administrativa» en 2013, consideró que el acto debía realizarse debido a que es una «tradición con amplio arraigo» en la Venezuela republicana.