Mi mamá me dijo ayer: en Cuba ganaron los Castro…, por Eduardo López Sandoval
Autor: Eduardo López Sandoval
Mi madre en sus ochenta años no entró nunca a un aula de clases, no cumplió con un grado de los estudios llamados formales, pero parió, crió y preparó para superar las dificultades en que vivimos a cinco venezolanos –todos vivitos y coleando–. Que es como la equivalencia exitosa de los cinco niveles de estudios: primarios, secundarios, universitarios, posgrado y post doctorado. Conocimientos no les faltan, y sabiduría le sobra.
Y me dijo con un tono de amarga anuencia:
-En las elecciones de Cuba ganaron los Castro otra vez.
Es una verdad monumental.
Intenté enmendarle la plana, cuestión que es de espinuda dificultad cuando tratamos de temas relacionados con la corriente cotidianidad política de Venezuela, quizás creí tener ventajas adentrándonos en la materia internacional, donde creo que su desempeño es menor, le dije:
-Pero es que en Cuba no hay elecciones como tal, allá quienes eligen al presidente es el Parlamento…
-Pero es igual…, igual eligen un presidente, ¿en la Isla quiénes pueden ser candidatos? ¿Había posibilidad de un candidato no castrista?
*Lea también: Construir la Caracas de la convivencia, por Roberto Patiño
Los segundos sin respuesta en la joven y fresca mañana calentaron como horas del mediodía. Ambos sabíamos que era ella –como casi siempre-, quien tenía la respuesta. Ella se respondió:
-Si sólo hay candidatos castristas, siempre ganará uno de ellos… Es igual que las elecciones presidenciales en Venezuela, como en Cuba ya todos sabían quién iba ganar… el castrista.
Conclusión del crío: La experiencia del mundo dice que siempre-siempre-siempre, los excepcionales escenarios políticos de hiperinflación y hambruna no son de largo tiempo, y tienen un final cantado: el cambio de régimen. En Venezuela, por la también excepcional situación de Dictadura del Siglo XXI, es al contrario, quien dirige los destinos de este desastre es el seguro ganador.
Razonamiento de una red social: ¿Ganará Falcón? Si la respuesta es positiva, también lo es a la pregunta, ¿podemos estar peor? … A quienes estén preparándose para votar en las elección de Maduro, que se dicen opositores, les informo: Están participando en una pelea de boxeo arreglada, el Gobierno compró al boxeador contrincante y al referí (CNE), y tiene en el bolsillo a los jueces (TSJ), ha invitado a los observadores internacionales que ocuparán las primeras filas del público sin otra opción que no sea aplaudir al monarca. Ustedes son el público de la galería más triste de este espectáculo. Nosotros, los que no votaremos, no precisamente por Abstencionistas, estamos lejos de este teatro bufo, y cerca de la realidad inmediata: el hambre ineludible