Mi amigo Teodoro, por Tony Rivera Chávez
En la década de los sesenta del siglo pasado cuando cursaba bachillerato en una tranquila noche caraqueña cuando visitaba un radio del PCV ubicado cercano ami zona residencial(Callejón Pedroza, La Florida) hice contacto visual con el “catire” Teodoro el cual en una rueda de camaradas hablaba sobre Política de tal forma que no dejaba rendijas abiertas para la disidencia por su poder convincente y racional. Posteriormente como delegado a una Asamblea Nacional de Estudiantes efectuada en la UCV nuevamente sentí la fuerza de Teodoro cuando esta vez se trataba de defender la autonomía universitaria y allí estaba la voz de la resistencia arengando el combate.
Al tiempo, Teodoro tomó el camino de la denuncia contra el Imperio Soviético y la invasión a Checoeslovaquia lo cual además les costó el repudio del Castrismo Cubano ya hundido en la dependencia hacia el amo poseedor de los dólares,armas y su sostén internacional. Hasta clamaron por su eliminación física. Así sería de importante la respuesta de este dirigente revolucionario que el propio Presidente del Imperio (Leonev Bresnev) tomo el caso como algo de gravedad extrema para dejar claro la importancia y el valor intelectual del denunciante. Lo acusaron de renegado. Al final el preclaro Teodoro tuvo la razón y el invasor ruso a la larga salió de todos esos países ocupados para dejar en el ambiente odio hacia esas prácticas criminales Imperialistas.
Llegando en este recuento a los años ochenta iniciándose la de los noventa siendo funcionario del Min Hacienda tome la decisión de enfrentarla mafia allí presente que se había constituido en el Poder Real y dominante en esta institución. Inspector General de Hacienda (IV) con facultades legales para investigar empecé una tarea de denuncias y actividades contra el problema. La respuesta fue una demanda por difamación al mejor estilo de las Tribus Judiciales de la época .Una fotocopia de un artículo de prensa y un demandante (funcionario del MinHacienda)aceptada por una juez, sin más ni menos para llevarme a la cárcel. El juicio caminaba y parecía que no tenía escapatoria. El catire tenía un Programa de Radio en horas del mediodía lo llame y le explique la situación. Sin dudas, ni extravíos me puso a personas de su confianza a la orden. El diputado Luis Manuel Esculpi se convirtió en contacto clave quien me presento a su vez a un Inspector de Tribunales (El Gato Fuentes) quien fue mi auxilio legal para desbaratar la injusticia.
El tal juicio se hundió en la nada bajo la fuerza de la verdad para quedar agradecido eternamente porque debo decir que en esta lucha contra la corrupción todos le sacaban el cuerpo al compromiso y la solidaridad»
Luego uno de estos personajes acusadores y en especial a uno que apodaban Lagarto Preña’o por su figura, llego al Min Agricultura y contacte a Teodoro para hacerle la observación en un gobierno donde él era Ministro de Cordiplan (Caldera II) y este le dio curso a la información pero el Ministro copeyano engaveto el asunto para que la Delincuencia Fiscal Organizada se expandiera con rigor hacia este organismo que a decir verdad estaba en manos de los corruptos desde siempre.
El caso para mi es que Teodoro nunca evadió esa responsabilidad como Político de actuar contra los corruptos y sus métodos de lo cual dejo constancia para lamentar que mi enlace con él en esa lucha llego tarde porque de haberlo hecho tiempo atrás mucho se hubiera salvado de los Fondos Públicos para el bienestar popular. También debo reconocer su confianza cuando me comunico su deseo de llevarme al cargo de Director General de Inspección y Fiscalización del MinHacienda pero a sabiendas de lo que eso significaba para quien se había enfrentado a una estructura corrupta y poderosa imposible de ser destruida desde una sola posición administrativa no le tome la palabra como para insistir en el tema. Agradecido por siempre hacia quien fue salvavidas en momentos de angustia para mí y mis familiares.
Sin duda Teodoro fue un honesto activo. Paz a sus restos.