Mi mamá me mima, por Reuben Morales
Twitter: @ReubenMoralesya
Ya nadie es monedita de oro, así lo quiera ser. Quise hacer la prueba de que todo ofende con la más inocente frase de nuestra infancia y terminó siendo tan ofensiva, como un sacerdote siendo imagen de una campaña de Unicef. Para demostrarles que esta aseveración ya tiene estatus de Ley Universal, miren cuántas comunidades se ofenden con las frases: «Mi mamá me mima. Mi mamá me ama».
Las feminista: ¡Esa frase la escribió el patriarcado! Claramente es una madre soltera abandonada por un hombre machista y mujeriego que la dejó para ir a mimar y amar a otra mamá.
Los machistas: ¿Y por qué «mi mamá me mima» no incluye a un hombre? ¡El hombre es quien sale a trabajar para que ella se quede mimando al niño! ¡Es una frase sexista, excluyente y no aboga por la igualdad de géneros! Exigimos que se cambie por «mi papá me pipa. Mi papá me papa».
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Los LGBTIQ: ¿Y si somos dos papás?
Los socialistas: Esa mamá lo mima sola ya que el papá está esclavizado por un sistema cruel de producción. El humano debería crecer en un mundo donde lo mimen dos padres que no trabajan porque el gobierno les expropio las empresas.
Los prolactancia: ¡No! La madre ama cuando da pecho. Esa frase de seguro fue instaurada secretamente por un laboratorio que produce fórmulas artificiales para hacer a los niños dependientes de los productos empaquetados y llenos de químicos. Cambiemos la frase por «mama la mama de tu mamá».
Los antivacunas: De seguro lo está mimando porque lo acaba de vacunar, el niño se siente mal y le está dando cariños para apaciguar la fiebre. Si no quieres que tu hijo se contagie, ¡no lo mimes de cerca! ¡Quién sabe cuántos virus traes de la calle, madre irresponsable! ¡Distanciamiento social y lavado de manos! ¡Si lo quieres mimar, mándale un sticker por el celular!
Los inmigrantes: Eso es mentira. Nosotros nunca vemos a nuestros hijos porque emigrar es trabajar. ¡Dennos papeles y los mimaremos!
Los psicoanalistas: ¿Ven? ¡Esta frase es la culpable de generaciones y generaciones estancadas en un complejo de Edipo que no les deja salir del nido! Es hora de que aprendan a leer con «mi mamá me grita. Mi mamá me reclama».
Las me too: ¿Lo mima? ¿Por dónde lo mima? ¿Cómo lo mima? Claramente hay un acoso solapado. ¿Alguna vez te hicieron leer esas frases sin tu consentimiento? ¡Denuncia ya a tu profesor!
Los dog lovers: ¿Por qué humanizar todo? ¿Y los derechos de los cachorritos? ¡Es imperativo tener una frase para que a los cachorritos no los separen tan temprano de sus madres! Luchemos por un mundo donde digamos «mi mamá me huele. Mi mamá me lame».
Los blancos: Esa madre y ese hijo no son blancos. Nuestros hijos los cría la nana.
Los negros: Esa madre y ese hijo no son negros. Nosotros no los mimamos. Nosotros les gritamos.
Los chinos: Esa madre y ese hijo son blancos o negros. Nosotros no los mimamos, nos los comemos.
Los musulmanes: ¡Esto nos excluye! ¡Claramente es la Virgen María consintiendo a Jesús! ¡Quememos el colegio!
¿Ven? Claramente ya no se puede decir nada en ningún lado sin que salte algún ofendido por ahí. Por eso, téngalo claro ya y por el resto de sus días. Ya nadie es monedita de oro. Como mucho, es monedita de goldfield.
Reuben Morales es Comediante, profesor de Stand Up Comedy y escritor de humor.
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