Maduro concreta golpe de Estado a la Asamblea Nacional

Mientras la nueva junta se juramentaba, la mayor de los diputados de oposición intentaban llegar al Palacio Legislativo, ante las trabas impuestas por varios piquetes de la Guardia Nacional
En una sesión sin quórum, debate ni votación, fue instalada una nueva junta directiva encabezada por Luis Parra como presidente, Franklin Duarte como primer vicepresidente y José Gregorio Noriega como segundo vicepresidente, además de Negal Morales como secretario de Cámara.
La juramentación se realizó sin comprobar quórum ni efectuar votos por plancha, como establece el protocolo. Mientras la nueva junta se juramentaba, la mayor de los diputados de oposición intentaban llegar al Palacio Legislativo, ante las trabas impuestas por varios piquetes de la Guardia Nacional (GN), incluido el presidente del parlamento que debía encabezar la sesión, Juan Guaidó.
Franklin Duarte, quien se encargó de leer el juramento a Parra, declaró que habría un cambio radical en el manejo del parlamento, y que de ahora en adelante «sí se le daría la cara a la calle».
En su breve discurso, culpó a Guaidó y a los diputados que encabezaban el Poder Legislativo, de dejarse llevar por intereses particulares, y los responsabilizó de ser los únicos culpables de mantener a Nicolás Maduro en el poder.
El diputado también recordó que este año habrá elecciones legislativas, y aseveró que «los primeros que buscarán los votos» serán los diputados que están con Guaidó. Tras hablar por menos de cinco minutos, Duarte dio por concluida la sesión.
El canal del Estado, Venezolana de Televisión, transmitió en vivo la proclamación de la nueva junta directiva y dio por hecho este cambio de directiva. Argumentaron que Guaidó retrasaba la sesión debido a que no contaba con suficientes votos para juramentarse.
Apoyo del chavismo
El representante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Francisco Torrealba ofreció declaraciones para explicar su versión lo que sucedió en la abrupta sesión. Argumentó que Guaidó no contaba con los votos necesarios para ser reelecto, por lo que retrasó intencionalmente la sesión y, debido a que no iniciaba, dieron inicio sin la presencia del presidente electo del parlamento.
De acuerdo con el parlamentario chavista, se hizo aplicación del Reglamento de Interior y Debate, que establece que, ante la ausencia del presidente, debe iniciar la sesión el parlamentario con mayor edad presente en el hemiciclo, por lo que se encargó Héctor Agüero, militante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Agregó que la fracción chavista decidió apoyar esta proclamación por el cambio de postura con respecto a Guaidó. «Con esa fractura, pensamos que es posible hablar en otros términos. Siguen siendo opositores, pero en nuestro criterio, responden a los intereses de este país. Por eso votamos por ellos», aseguró.
También dijo que iniciará una nueva etapa de «reinstitucionalización» en la que se respetarán los derechos de los diputados y del pueblo, en la que «se empezará a hacer política».
Diputados en la olla
La nueva junta directiva está conformada por tres de los diputados que fueron señalados de participar en una presunta trama de corrupción, en la que mantenían tratos con empresarios que trabajan con el gobierno de Nicolás Maduro, concretamente con Carlos Lizcano, subalterno de los sancionados Álex Saab y Álvaro Pulido y propietario de Salva Foods, empresa que maneja las Tiendas CLAP.
Estos parlamentarios, presuntamente otorgaban oficios de buena voluntad a otros países para abogar por Lizcano y así evitar sanciones.
Tras ser expulsados de sus respectivos partidos inició una investigación en el seno de la Asamblea Nacional en contra de ellos. En este contexto, empezaron a manifestarse públicamente en contra de las políticas de Guaidó y las directrices de la oposición que lidera el parlamento.
Horas antes de que iniciara la sesión en la que se instalaría una nueva junta directiva, el diputado José Brito propuso abiertamente, en declaraciones a VTV, una nueva directiva conformada por Parra, Duarte, Noriega y Morales; quienes terminarían siendo juramentados en medio del caos presentado en el hemiciclio y ante la ausencia de la mayoría de los diputados de oposición.
*En desarrollo