Monseñor Moronta pide a Maduro oír el clamor del pueblo y permitir ayuda humanitaria
El obispo del estado Táchira Mario Moronta llamó a la FAN a atender su juramento y escuchar el llamado del pueblo. Afirmó que el juramento de defender a la patria no quiere decir que «deben estar servilmente a la defensa de una parcialidad política»
El obispo de San Cristóbal, Monseñor Mario Moronta, envió una carta pública y abierta al gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, para pedirle que escuche el clamor del pueblo y permita el ingreso de ayuda humanitaria al país.
A su juicio no es secreto que el país afronta «la más grave crisis política, económica, social y moral» y «negarlo es querer tapar el sol con un dedo o demostrar que se está encerrado en una cúpula de cristal». Ante el disgusto que a su juicio siente el gobierno de Nicolás Maduro cuando se asegura que hay crisis humanitaria en el territorio nacional se preguntó que «¿Cómo caracterizar la situación que golpea a la inmensa mayoría de nuestros hermanos».
El clero aseveró que no puedo negarse el deterioro en la calidad de los venezolanos. En este sentido, sostuvo que en la nación petrolera «hay hambre: muchas familias no comen lo necesario para poder alimentarse. Ha crecido la pobreza crítica y los índices de desnutrición son altísimos.»
«La salud se ve desguarnecida en todos los sentidos, desde la atención hospitalaria hasta la consecución de medicamentos. Hay muchos que están sufriendo por la falta de atención», agregó.
Con respecto a las calamidades que afronta la ciudadanía y que el Gobierno ha reiterado es culpa de «la guerra económica», Monseñor sostuvo que es verdad que existe una «guerra económica», pero esta no es contra el Ejecutivo ni sus instituciones sino contra el pueblo. En este mismo orden, precisó que la corrupción es uno de los factores que han agudizado la situación de Venezuela y ha sido liderada por muchas personas que se denominan servidores de la nación. Así como también «el olvido de las atenciones que hay que dársele al pueblo».
Hizo referencia a las colas que los tachirenses deben hacer para adquirir combustible en la entidad. Asimismo, afirmó que «el contrabando de combustible es escandaloso y casi “irreversible”, debido a que «quienes tienen la misión de velar por la protección del pueblo o se hacen de la vista gorda o, sencillamente, tienen parte en el negocio».
Aseguró que si el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) dejara de perseguir a quienes piensan diferente al Gobierno y se dedicara a hacer labores de auténtica inteligencia; «así podrían descubrir la presencia de grupos irregulares en el país, particularmente en nuestra región tachirense; de seguro descubrirían los “negociados” de muchos dirigentes y autoridades, así como de civiles, en torno a lo que es el contrabando de gasolina y otros insumos necesarios», además de otros hechos de corrupción.
Moronta pidió a Maduro a escuchar el clamor del pueblo para sensibilizarse y aceptar la ayuda humanitaria de quienes la ofrecen debido a que a su juicio es el bien del pueblo y no el de un grupo de personas. Al mismo tiempo, pidió al Gobierno a no impedir la ayuda de otros países hacia los venezolanos y a dejar de decir que no es necesaria.
Evite el derramamiento de sangre; deje a un lado la persecución a los disidentes; escuche y sienta el padecimiento de un pueblo que quiere libertad y justicia, pero con dignidad y sin opresión. Usted suele hablar de las influencias del “imperio”, escribió.
El prelado llamó a los miembros de la Fuerza Armada Nacional (FAN) a atender su juramento y escuchar el llamado del pueblo así como también a garantizar su seguridad. Afirmó que el juramento de defender a la patria no quiere decir que «deben estar servilmente a la defensa de una parcialidad política».
«Es cierto que deben mantener y sostener el orden. Pero, al hacerlo han de respetar las leyes y el ordenamiento jurídico de la nación. Dicho juramento apunta a defender la dignidad, el protagonismo y los derechos de todos los ciudadanos del pueblo venezolano. Cumplan con sus obligaciones, pero sin olvidar que son miembros del pueblo al cual sirven. Nunca olviden esto. Por eso, les pido en el nombre del mismo Dios en el que la inmensa mayoría de ustedes creen que nunca levanten ni la voz ni las armas en contra de sus hermanos», finalizó.