¡No + Bullying!, por Griselda Reyes
@griseldareyesq
Esta semana conmemoramos el Día Internacional contra el Bullying o el Acoso Escolar, un tema sensible y que ha cobrado fuerza de nuevo en Venezuela en las últimas semanas. Veo con hondo pesar la proliferación de casos que se viralizan en redes frente a la mirada indolente de muchos. El caso de un colegio en el estado Bolívar y otro similar en el municipio San Francisco del estado Zulia, son muestra de ello.
Es un tema sobre el que he escrito una, otra y otra vez, por lo cercano que lo siento y la gran frustración que me genera que nuestras generaciones de relevo en lugar de prepararse para sacar el país adelante, estén perdiéndose en bufas y abusos contra sus pares escolares.
Soy dirigente política y empresaria, sí. Pero antes de todo, soy madre de un adolescente al que constantemente le habló de la importancia del respeto y la tolerancia con los demás. Este es un tema sobre el cual hay que hablar mucho, pero, sobre todo, trabajar, porque atañe a todos, no solo a la víctima.
Señores, debemos tener tolerancia cero frente a este tipo de agresiones. Pero antes de condenarlas, debemos estimular en todos los ámbitos de la vida: casa, escuelas, iglesias, clubes, espacios de formación deportiva, una férrea campaña de concientización para acabar con esta situación tan atroz que pone en grave riesgo la vida de jóvenes.
El Estado venezolano debe ser capaz de garantizar justicia frente a estos vejámenes, pero no pueden ser los jóvenes agresores víctimas de un sistema de justicia que, en lugar de corregir a quien comete una infracción, se torna un verdadero infierno para quien delinque.
Desde esta trinchera, creo que los jóvenes que cometen este tipo de desmanes deben ser foco de estudio psicológico y a su vez, de transformación. ¿A qué nos referimos? Quienes acosan a sus compañeros de clase o amigos, deben pasar por un importante proceso de corrección para que sean agentes de cambio. A su vez, deben ser quienes estimulen a otros agresores a abandonar estas acciones con promoción de mensajes en las escuelas. Aprovechemos que el Ejecutivo las ha reabierto para hablarle cara a cara a nuestros adolescentes.
Lea también: Yo solo pasaba por ahí, por Omar Pineda
Recuerdo que en el pasado reciente se les hablaba a nuestros estudiantes de la importancia de la educación sexual en función de evitar el embarazo adolescente. Hoy, esta política debe reforzarse y complementarse con charlas que prevengan el bullying. Será así la forma de generar una sociedad sana donde no seamos testigos, cada dos días, de casos virales de unos jóvenes atacando sin pudor a otros.
Un mensaje a los padres
Este es un tema que no solo debe ocuparnos a padres o madres cuyos hijos sean víctimas de acoso escolar por una condición física o actitud personal. No, llegó la hora de asumirlo como un problema social que nos involucra a todos. Son cientos de miles los casos que citan los especialistas de jóvenes que son víctimas de agresiones y no dicen nada en sus hogares.
Somos nosotros, padres y madres, los responsables de acompañar a nuestros hijos en lo que, particularmente creo, es la etapa más importante de sus vidas. Si su hijo está desmotivado o no quiere ir a la escuela, averigüe qué está sucediendo. Encienda las alertas ante de que sea tarde.
El acoso escolar no es un tema sencillo o fácil de digerir para los jóvenes. Por eso, con el corazón en la mano hoy les pido a todos ser copartícipes de cualquier iniciativa que busque frenar estas situaciones. No acostumbre a sus hijos a ver con normalidad la burla a otros niños. Creemos conciencia en el hogar para promover una mejor sociedad.
Grisela Reyes es empresaria. Miembro verificado de Mujeres Líderes de las Américas.
TalCual no se hace responsable por las opiniones emitidas por el autor de este artículo