• Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • De interés
    • Elecciones municipales 2025
    • Elecciones regionales 2025
    • #LaHoradeVenezuela
    • Alianza Rebelde Investiga
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Teodoro
    • Nuestra historia
  • Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • De interés
    • Elecciones municipales 2025
    • Elecciones regionales 2025
    • #LaHoradeVenezuela
    • Alianza Rebelde Investiga
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Teodoro
    • Nuestra historia

Ozark: crimen y familia, por Ángel R. Lombardi Boscán



0
Comparte
  • Compartir en Facebook
  • Tuitealo

FacebookTwitterWhatsAppTelegramEmail
A.R. Lombardi Boscán | @lombardiboscan | septiembre 20, 2018

@lombardiboscan


OZARK, es la banalidad del mal en todo su esplendor, tesis ésta que se la debemos a Hannah Arendt (1906-1975), brillante pensadora alemana. OZARK es una referencia a la sordidez entre humanos alrededor del dinero y unas ansias de lucro desmedidas, incontrolables. El Dinero como elemento supremo de una voluntad de vivir trágica y transgresora chapuceando desde el barro maloliente. Cuando vemos el esplendor reluciente de ciudades como Dubai en las cercanías del Golfo Pérsico con su Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo (828 metros) erigido en pleno desierto, uno llega a pensar que se trata de un emprendimiento legítimo, de unas tribus árabes que se modernizaron en los negocios aprovechando la lotería del petróleo en el subsuelo.

No obstante, básicamente, todas las fortunas tienen un origen penoso, fraudulento. Detrás de las fachadas luminosas se esconde el narcotráfico, el lavado de dinero y la venta de armas junto a otros negocios turbios que las leyes sociales condenan y castigan pero que forman parte del llamado “sistema”.

Así vemos en OZARK, otra buena serie bajo los auspicios de Netflix, la conjunción de un FBI que incurre en actividades corruptas para atrapar a las bandas corruptas. A una familia clase media estadounidense convencional que asume una normalidad falsa porque sus progenitores decidieron tratar con delincuentes pretendiendo con ello obtener recompensas desde la ilusión de que podrían zafarse sin apenas daños.

A los narcos mejicanos y su tendencia a una crueldad sin límites con tal de prevalecer desde la fuerza del miedo dirigido a sus rivales. Una familia disfuncional sureña, poblada de criminales de poco pelo aunque con “sentimientos” acerca de un renacimiento social indisimulado desde el más grande rencor. Y finalmente, una pareja de sociópatas, campesinos rurales, cultivadores inocentes de “amapolas”, con “principios” como el respeto, lectores de la Biblia y otras tonterías caballerescas que no tienen reparo en matar a los rivales sin pestañar.

En OZARK la misericordia está ausente por completo, sólo existe la traición o la gratitud. El punto medio es un espejismo filosófico. En cristiano significa que en los negocios no hay amistades ni nexos consanguíneos que valgan

Shakespeare, una vez más, en todo su esplendor, sólo que sin reyes asesinados ni mujeres fatales como Lady Macbeth. La traición como resultado de la ambición sin límites y la gratitud la contraprestación de los favores recibidos. Para ganar hay que golpear y los comportamientos decentes son la apariencia de una hipocresía social institucionalizada. Y con todo, estos malhechores, invocan los más elevados principios como respeto, familia, leyes, lealtad, honor y Dios como códigos de conducta de una tradición para justificar el autoengaño y la tropelía de pecados.

Muchas subtramas, bien llevadas, y sostenidas por la pareja actoral Bateman-Linney. Una vez más, nos encontramos con la premisa de que sólo dos buenos actores pueden arrastrar la carroza hacia el éxito. Los otros elementos secundarios de la serie, tampoco es que desentonan, sobretodo, hay un cuidado especial en aspectos claves como la producción alrededor de recursos grandilocuentes como la magnificencia de los escenarios naturales teniendo al río Misuri (el más grande de norte américa) y toda su majestuosidad como la joya de la corona. Pero son las dos historias en una de éste matrimonio “normal” lo que permite que OZARK se vaya tejiendo desde una violencia serena y unas culpas sin tormento.

*Lea también: Crisis de representatividad, por Gonzalo González

En OZARK hay recurrencias inevitables al clásico de los clásicos en éste tipo de tema: “El Padrino” de Francis Ford Coppola (1972) y acerca de la serie de las series: “Breaking Bad” (2008). Sólo que la originalidad de OZARK reside en la inmersión de la psicología de sus dos principales protagonistas, ambos analfabetos emocionales, incapaces de aceptar y reconocer abiertamente que son unos malvados sin redención. Es como dijo el criminal nazi Adolf Eichmann (1906-1962): “no se me puede acusar de cometer crímenes porque sólo cumplía órdenes”. ¿Problemas de conciencia? Cero, menos cero. Y de ésta misma forma, Marty y Wendy, sobrellevan sus tratos con criminales y políticos, que al parecer, y de acuerdo a los creadores de OZARK, conforman una misma especie de malandraje.

Marty Byrde (Bateman), es una personalidad opacada, un adicto al trabajo contable sin incentivos vitales hasta que los narcos mejicanos para los que trabaja le espabilan y le colocan en una encrucijada definitiva. Su “pasión” no nos conmueve porque es una víctima graciosa, es decir, acepta sin rebelarse un destino que sabe que le va a perder irremediablemente junto a los suyos. Marty Byrde, termina siendo irreal, porque su capacidad para evadir peligros no es común a menos que pensemos que su comportamiento anodino es un mecanismo de sobrevivencia único en una jungla de animales de presa voraces. Quizás, esa pasividad ontológica, esa voluntad del desgano y opacidad pública, sea la clave de su éxito como mediador entre rivales irreconciliables.

Uno supone que en algún momento Marty Byrde va a explotar y reparar tantas humillaciones por las cuales transcurre su vida infeliz. Pero que va: su rutina preferida es agachar la cabeza y resolver como mediador desde unas lealtades siempre ambiguas. Ya veremos que nos deparará la continuación de ésta saga criminal en su tercera temporada, porque lo que está claro, de acuerdo a la forma abrupta en que terminó la segunda temporada, es que tendrá su continuación. Esto que es legítimo para el negocio de las series puede también ser una completa omisión, y con ello nos referimos a la incapacidad de saber cerrar las buenas historias, como es el caso de OZARK.

Director del Centro de Estudios Históricos de LUZ

Post Views: 3.977
FacebookTwitterWhatsAppTelegramEmail
0
Comparte
  • Compartir en Facebook
  • Tuitealo

Ángel R. Lombardi BoscánOpiniónOzark


  • Noticias relacionadas

    • El camino de un nuevo mundo, por Alexander Cambero
      agosto 23, 2025
    • El medico frívolo, por Gustavo J. Villasmil-Prieto
      agosto 23, 2025
    • Orden y responsabilidad en tiempos de guerra, por Nicolás Albertoni
      agosto 23, 2025
    • Harakiri (1962): no hay honor sin humanidad, por A. R. Lombardi Boscán
      agosto 22, 2025
    • La alimentación en tiempos de inflación: el costo de una dieta, por Estefanía Suárez
      agosto 22, 2025

  • Noticias recientes

    • Represión no cesa: 326 políticos, periodistas y activistas presos desde el #28J de 2024
    • El camino de un nuevo mundo, por Alexander Cambero
    • El medico frívolo, por Gustavo J. Villasmil-Prieto
    • Orden y responsabilidad en tiempos de guerra, por Nicolás Albertoni
    • Poderes públicos y otros sectores firman acuerdo en defensa la soberanía y paz del país

También te puede interesar

Listas y recuerdos, por Aglaya Kinzbruner
agosto 22, 2025
Carta a Monseñor Enrique José Parravano Marino, por Rafael A. Sanabria M.
agosto 22, 2025
Así, cuando la democracia se aleja de los jóvenes, por Luis Ernesto Aparicio M.
agosto 21, 2025
Farsantes, por Freddy Gutiérrez Trejo
agosto 21, 2025
  • Portal venezolano fundado por Teodoro Petkoff, comprometido con la verdad, ejerciendo la libertad de expresión. 25 años ofreciendo actualidad informativa, reportajes, investigaciones, análisis y opinión. Un producto de Editorial La Mosca Analfabeta.

  • Contacto: [email protected]

    Síguenos
  • Noticias

    • Poderes públicos y otros sectores firman acuerdo en defensa...
      agosto 22, 2025
    • Cancillería acusa a Guyana de "maniobra" para "sembrar...
      agosto 22, 2025
    • Presidente de Costa Rica denuncia un "intento de golpe...
      agosto 22, 2025

  • A Fondo

    • Represión no cesa: 326 políticos, periodistas y activistas...
      agosto 23, 2025
    • Experimento Fallido: fracaso de Misión Ciencia afectó...
      agosto 22, 2025
    • Lo que sabemos del despliegue naval de EEUU en el Caribe...
      agosto 21, 2025

  • Opinión

    • El camino de un nuevo mundo, por Alexander Cambero
      agosto 23, 2025
    • El medico frívolo, por Gustavo J. Villasmil-Prieto
      agosto 23, 2025
    • Orden y responsabilidad en tiempos de guerra, por Nicolás...
      agosto 23, 2025


Diseñado y Desarrollado por Binaural
  • Noticias
  • A Fondo
  • Lo Nuestro
  • Opinión
  • Migrantes
  • Regiones
  • EEUU
  • De interés
    • Elecciones municipales 2025
    • Elecciones regionales 2025
    • #LaHoradeVenezuela
    • Alianza Rebelde Investiga
  • Videos
    • Multimedia
    • La República que Tortura
      • Documental en Youtube
  • Nosotros
    • Principios editoriales
    • Manual de estilo
    • Teodoro
    • Nuestra historia
Presione enter para comenzar su búsqueda