Países nórdicos, por Gonzalo Oliveros Navarro
Quizás por su lejanía de estas tierras, los suramericanos en general vemos a esos países como muy ajenos a los nuestros. Lo cierto es que, respecto de lo que en Venezuela o respecto de ella ocurre, Finlandia, Dinamarca, Suecia y Noruega, cada quien a su manera siguen muy atentamente nuestra situación.
Desde hace más de un año, con algunos de sus representantes diplomáticos hemos tenido la posibilidad de interactuar. Nos han requerido ampliar la información que ya tienen respecto de nuestra situación y uno ha tratado de dárselas con la mayor objetividad, dado que nada gana Venezuela si en los análisis que se presentan y las exposiciones que se hacen priva la emoción sobre la razón.
Cuando un país no tiene conflicto interno, puede dedicar su atención a coadyuvar en la solución de los de los otros. Seguramente que ello no se hace pensando exclusivamente en el bienestar común, sino también –y lícito es- en eventuales beneficios que las empresas del respectivo país pueda obtener. En el fondo, es lo correcto que el interés principal de un gobierno sea el progreso de sus ciudadanos y si este se consigue ayudando a otros países a resolver su situación, pues adelante.
Esta semana se celebró en Bogotá el día de la independencia de Finlandia. Por segundo año consecutivo, el señor Embajador de ese país en Colombia –concurrente con Caracas- Jarmo Kuuttila y su señora, tuvieron la gentileza de invitarnos a acompañarles en esa fecha. En las palabras que él dirigió a la concurrencia, afirmó algo que me impactó vivamente:
Finlandia recicla el 99% de los desechos que produce y lo hacen –en su mayoría- empresarios menores de 30 años. Fue muy discreto el señor Embajador al hacer solo la afirmación. Yo en mi mente pensé “eso es desarrollo”.
Quizás cuando nuestras preocupaciones tercermundistas sean superadas, nosotros podamos dedicarnos a hacer lo que los países nórdicos, en beneficio de la comunidad internacional pero –sobre todo- pensando en el bienestar de nuestros respectivos ciudadanos.