Papa Francisco pide «paz en la martirizada Ucrania» en su mensaje de Pascua
El Papa leyó su mensaje de Pascua desde el balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro, antes de la bendición «Urbi et Orbi», este Domingo de Pascua. También oró por la paz en Oriente Medio y asistencia para los pueblos de América Latina
«Que haya paz en la martirizada Ucrania, tan duramente probada por la violencia y la destrucción de la guerra cruel e insensata a la que ha sido arrastrada. Que un nuevo amanecer de esperanza despunte pronto sobre esta terrible noche de sufrimiento y de muerte», pidió el papa Francisco este 17 de abril, Domingo de Resurrección.
El Papa leyó su mensaje de Pascua desde el balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro, antes de la bendición Urbi et Orbi, este Domingo de Pascua.
Tras celebrar la misa del Domingo de Resurrección, en la plaza de San Pedro y ante 50.000 personas, el papa se refirió a la «incredulidad» que estamos probando con esta «Pascua de guerra», en referencia a la guerra rusa en Ucrania; reseñó la DW.
«Que se elija la paz. Que se dejen de hacer demostraciones de fuerza mientras la gente sufre», aseveró Jorge Bergoglio asomado al balcón en el que se presentó al mundo como papa el 13 de marzo de 2013.
Y rogó: «Por favor, no nos acostumbremos a la guerra, comprometámonos todos a pedir la paz con voz potente, desde los balcones y en las calles».
Francisco pide paz en una «Pascua de guerra»
El Papa calificó los combates en Ucrania como una guerra «cruel y sin sentido» durante la misa del Domingo de Resurrección, la primera que se celebra con público desde el comienzo de la pandemia.#DWNoticias /ir pic.twitter.com/3Qdpw9pmXN
— DW Español (@dw_espanol) April 17, 2022
*Lea: Guerra en Ucrania ha dejado casi cinco millones de refugiados
Francisco, que hoy sí presidió la misa mientras que ayer no pudo oficiar la Vigilia por sus problemas en la rodilla, lamentó que tras la pandemia «era el momento de salir juntos de la mano» y, sin embargo, «estamos demostrando que tenemos todavía en nosotros el espíritu de Caín, que mira a Abel no como a un hermano, sino como a un rival, y piensa en cómo eliminarlo», dijo.
El pontífice mencionó además «a las numerosas víctimas ucranianas, a los millones de refugiados y desplazados internos, a las familias divididas, a los ancianos que se han quedado solos, a las vidas destrozadas y a las ciudades arrasadas».
El Papa concluyó recordando que «toda guerra trae consigo consecuencias que afectan a la humanidad entera» | Foto: DW
El Papa también pidió por América Latina
Francisco pidió que Dios asista a los pueblos de América Latina donde, además de por la pandemia en, algunos casos, «han visto empeorar sus condiciones sociales, agravadas además por la criminalidad, la violencia, la corrupción y el narcotráfico».
«Que Cristo resucitado acompañe y asista a los pueblos de América Latina que, en estos difíciles tiempos de pandemia, han visto empeorar, en algunos casos, sus condiciones sociales, agravadas también por casos de criminalidad, violencia, corrupción y narcotráfico», dijo el papa, sin citar ningún país en particular, como en otras ocasiones.
Paz en Oriente Medio
Volvió como todos los años a pedir la paz «en Oriente Medio, lacerado desde hace años por divisiones y conflictos»; y por la «reconciliación en los pueblos del Líbano, de Siria y de Irak» y para que Libia «encuentre estabilidad después de años de tensiones» y que la tregua firmada en Yemen en los últimos días «pueda devolver la esperanza a la población», señaló EFE.
El Papa concluyó recordando que «toda guerra trae consigo consecuencias que afectan a la humanidad entera: desde los lutos y el drama de los refugiados, a la crisis económica y alimentaria de la que ya se están viendo señales».
Con información de la DW y EFE