Paralización de planta Bimbo en Guarenas pone en riesgo más de 5.000 puestos de trabajo
Juan Crespo, presidente de Fretraharina, denunció que la situación también afecta a las 9.000 panaderías artesanales que hay en el país
“Queremos harina, queremos trabajar, queremos harina, queremos trabajar”, coreaban al unísono trabajadores de la planta de la empresa Bimbo, situada en Guarenas, estado Miranda, que se encuentra paralizada por la falta de materia prima.
Juan Crespo, presidente de la Federación de Trabajadores de la Industria de la Harina (Fretraharina), denunció que la paralización de la producción de la planta pone en riesgo a más de 5.000 puestos de trabajo, de los cuales 1.400 son directos, a quienes las autoridades de la empresa los enviaron para sus casas hasta nuevo aviso, pagándoles solamente el salario base. “Esto lo rechazamos contundentemente”, expresó.
Indicó que hace dos semanas el producto terminado que manufacturaba la planta se podía comprar en los supermercados y abastos entre 3.000 y 4.000 bolívares, pero ahora cuesta más de 7.000 bolívares. “Nosotros apenas cobramos 5 dólares, y si llevamos nuestro sueldo a soberanos, son nada más 600 bolívares diarios, que no alcanza para comprar ni siquiera un caramelo. Nosotros no estamos guarimbeando, lo que queremos es que el gobierno entienda que necesitamos harina”.
Precisó también que el precio del saco de 45 kilos de harina subió de 4.500 bolívares a 32.000 bolívares.
Señaló que la situación no solo perjudica a los empleados sino también a los consumidores venezolanos, quienes ocupan, según él, el cuarto lugar en el mundo de consumidores de pan y pasta, y sin producción se recrudecerá el desabastecimiento del producto. “Si esto sigue así terminaremos desayunando solo casabe, cosa que también rechazamos”, indicó.
“Esta planta está parada porque no hay trigo, una situación que también afecta a las 9.000 panaderías artesanales que hay en todo el territorio nacional. Quiero dejar bien claro que este es un llamado que le hacemos a Nicolás Maduro, quien viene del movimiento sindical y nos conocemos desde hace años; como también al ministro de Alimentación (Luis Medina) y la gente de Sunagro (Superintendencia Nacional de Gestión Agroalimentaria), que están viendo los inventarios que hay en cada planta. Lo único que queremos es que estos trabajadores tengan la materia prima para seguir trabajando y produciendo”, reiteró Crespo.
Indicó que el molino que está ubicado en la planta Catia, en la parroquia Sucre, tiene una capacidad instalada para producir un total de 30.000 toneladas, y el gobierno de Maduro apenas está asignando 5.000 toneladas, que alcanza solo para 15 días. “Fretraharina declaró una emergencia en la que advertíamos que de no venir 120.000 toneladas de trigo panadero, se generaría una crisis. Todo esto lo alertamos desde el año 2017, no era una profecía sino una realidad”, añadió.
