Pescadores de Sucre fueron reprimidos durante protesta por falta de gasolina
Los pescadores pertenecen a las comunidades de Punta Araya y El Rincón, del municipio Cruz Salmerón Acosta del estado Sucre
Unos mil pescadores de la Península de Araya protestaron la mañana del 20 de abril debido a que tienen 35 días sin salir a pescar por falta de combustible en el estado Sucre.
Ángel Martínez, pescador de Punta Araya, aseguró a El Pitazo que los 176 botes que conforman la flota pesquera de la zona no están saliendo a sus faenas diariamente, porque el gobierno no les está vendiendo gasolina y aceite para sus motores fuera de borda.
Los pescadores pertenecen a las comunidades de Punta Araya y El Rincón, del municipio Cruz Salmerón Acosta del estado Sucre. Tuvieron que caminar ocho kilómetros para llegar al punto de manifestación y afirmaron que seguirán en la calle y saldrán a protestar las veces que sea necesario.
Martínez indicó que hay desorden y descontrol en la venta del combustible por parte de los efectivos de la Guardia Nacional (GN) que se encuentran destacados en la estación de servicio fluvial La Marina, en Cumaná, donde se abastece a más de mil embarcaciones de los municipios Sucre y Cruz Salmerón Acosta.
El partido Vente Venezuela denunció que la Guardia Nacional reprimió con gases lacrimógenos y a golpes la protesta de los pescadores de Araya. «Este régimen criminal solo ha usado el covid-19 para someter con hambre y miseria a la población», aseguraron.
#Sucre | Hoy #20Abr la Guardia Nacional, por órden de los usurpadores del Estado, reprimen fuertemente a los habitantes de #PuntaDeAraya quienes reclaman por sus derechos.
Este régimen criminal solo ha usado el #COVIDー19 para someter con hambre y miseria a la población. pic.twitter.com/fQGXvy0iPi
— Vente Sucre Edo. Sucre (@VenteSucre) April 20, 2020
Por su parte, el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, reconocido como mandatario interino por casi 60 países, también denunció que «en medio de una pandemia y el desastre en los servicios públicos causado por la dictadura, 700 pescadores en Araya tienen que marchar kilómetros exigiendo lo más elemental: poder trabajar, vivir dignamente y garantizar el sustento de sus familias».