Piñera dice en la OEA que «no es una opción» la intervención militar en Venezuela
Sebastián Piñera rechazó una vez más la idea de la intervención militar en Venezuela para derrocar a Nicolás Maduro y ratificó que en el país no existe una democracia
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, ratificó el 28 de septiembre que una eventual intervención en Venezuela no puede ser considerada como una opción para encontrar una salida a la crisis por la que atraviesa el país.
«La opción militar no es una opción buena para este problema, uno sabe como comienzan las intervenciones militares, pero uno no sabe cómo terminan las invasiones, los muertos y el dolor y el sufrimiento», reafirmó ante el Consejo Permanente de la OEA.
Aclaró que pueden estudiarse y aplicar otros mecanismos «con más fuerza y voluntad» que puedan obligar al Gobierno que preside Nicolás Maduro «a reconocer y respetar esos valores esenciales».
Piñera tiene previsto reunirse este viernes con el presidente estadounidense, Donald Trump, con el tema de Venezuela en lo alto de la agenda. «Venezuela no es una democracia, no hay separación de poderes, no hay Estado de derecho, no hay libertad de expresión, no hay respeto a los derechos humanos», insistió.
Recordó haber estado en Venezuela y dijo que solo bastaba pisar nuestro país para palpar que no hay una verdadera democracia, sistema de gobierno que comparó con el sentimiento del amor.
Durante su intervención en la 73° Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, aseguró que su país seguirá apostando por “ayudar a los venezolanos con todos los instrumentos del derecho internacional a recuperar sus libertades, democracia y respeto a los derechos humanos”.
Para el mandatario se hace necesario que el Consejo de Seguridad de este organismo internacional, trate las crisis democráticas, en especial la situación de Venezuela.
Chile es parte del Grupo de Lima, conformado por 14 países americanos, una instancia creada en 2017 en Perú con el fin de colaborar en la búsqueda de soluciones para la crisis político-social que sufre Venezuela y que rechazó la idea de enviar tropas a nuestro país que produzca el derrocamiento de Nicolás Maduro.
Venezuela atraviesa una aguda crisis económica desde que se intensificó la caída de los precios del crudo entre 2014 y 2016. La debacle se caracteriza, además de la inflación, por una severa escasez de alimentos y medicinas.
Recientemente, el Gobierno venezolano acusó a diplomáticos de Chile, Argentina y México de estar supuestamente implicados en el «atentado» contra Nicolás Maduro por supuestamente haber ofrecido ayuda a los que llevaron a cabo el supuesto magnicidio de llevarlo a sus países.
Además, Chile fue uno de los países que introdujo una solicitud a la Corte Penal Internacional (CPI), para abrir una investigación contra el gobierno de Maduro por cometer supuestos de crímenes de lesa humanidad contra el pueblo de Venezuela.
Con información de AFP