Pizarro argumenta que requisito de visa incrementa flujo migratorio por rutas arriesgadas
Los países receptores implementan trabas migratorias, como la solicitud de una visa, para reducir el flujo migratorio, pero según el diputado Miguel Pizarro, estas medidas no funcionan y en su lugar los someten a situaciones que ponen en riesgo sus vidas, por lo que pide políticas más incluyentes
El diputado a la Asamblea Nacional (AN) electa en 2015, Miguel Pizarro, llamó la atención sobre la necesidad de políticas incluyentes por parte de los países receptores de la migración venezolana, al asegurar que la exigencia de visas no disminuye el flujo migratorio, sino que incrementa los riesgos para la población migrante.
A través de su cuenta de Twitter, el también comisionado designado por Juan Guaidó para representar el gobierno interino ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), hizo un recuento de las trabas impuestas por países receptores durante 2022 frente a la migración venezolana, con medidas como la exigencia visas solo a venezolanos en México, Costa Rica, Panamá, Belice y Honduras; o el nuevo programa para migrantes en Estados Unidos que exige un patrocinante.
«Las trabas migratorias, en vez de controlar el flujo migratorio, incrementan el riesgo de los migrantes y refugiados de sufrir peligros a manos de bandas ilegales. Son necesarias políticas incluyentes que permitan la inserción en los países de acogida», opinó.
El parlamentario recalcó que gracias a esta medida, han incrementado los casos de venezolanos intentando cruzar por rutas peligrosas como la selva del Darién y quedan a merced de bandas criminales que ponen en riesgo la vida de miles de personas.
«En 2022 aumentó el número de países que exigen visa a los venezolanos para su ingreso. A raíz de esto, aumentó también el número de personas que arriesgan su vida en selvas y océanos para poder llegar a su destino final», afirmó.
*Lea también: Desde Texas siguen enviando migrantes al norte de EEUU a pesar de mantener el Título 42
De acuerdo con el Servicio Nacional de Migración de Panamá, unos 107.692 venezolanos cruzaron el Darién hasta septiembre de 2022, entre los cuales se incluyen mujeres embarazadas, niños y adultos mayores.
«Muchos llegaron a su destino, pero otros tantos fallecieron en el camino o se encuentran desaparecidos», alertó Pizarro.
Las trabas migratorias en vez de controlar el flujo migratorio incrementan el riesgo de los migrantes y refugiados de sufrir peligros a manos de bandas ilegales. Es necesario políticas incluyentes que permitan la inserción en los países de acogida. pic.twitter.com/UlwNAGPzBl
— Miguel Pizarro (@Miguel_Pizarro) December 20, 2022
Las políticas de contención de la migración son tomadas por los gobiernos bajo el argumento de que la recepción de migrantes tiene un impacto social y económico importante.
A pesar de los argumentos de los países receptores, las cifras demuestran que el impacto de las poblaciones migrantes suelen tener una influencia positiva en el desempeño económico de esos países, ya que los inmigrantes no requieren de mayor inversión social por parte del Gobierno pero, en contraparte, constituyen una fuerza laboral de peso al estar en edades laborales y generalmente tener alto grado de formación académica y profesional.