Plataforma Unitaria debe recomponer liderazgos tras el triunfo de María Corina Machado
Los resultados de las primarias dejan en evidencia la opinión de la sociedad sobre un reemplazo de los partidos del llamado G4 (Acción Democrática, Un Nuevo Tiempo, Primero Justicia y Voluntad Popular) por un liderazgo que, si bien no es nuevo, no tiene un peso importante dentro de las decisiones de la Plataforma Unitaria
Foto de portada: Gustavo Alemán | El Pitazo
La victoria de María Corina Machado y su partido Vente Venezuela en las primarias son un campanazo para los partidos del llamado G4 (Acción Democrática, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y Voluntad Popular). La alianza de Vente con el partido de Leopoldo López no los deja fuera de ese reclamo popular, que busca nuevas caras dentro del liderazgo opositor y, especialmente, en la Plataforma Unitaria.
Daniel Varnagy, doctor en Ciencias Políticas y profesor de la Universidad Simón Bolívar, asegura que desde el mismo momento que haya un ganador «tiene que venir una recomposición de lo que hoy en día entendemos como la conducción o el liderazgo opositor».
Varnagy considera que debe separarse la dimensión pragmática de las primarias (elección del candidato, recuperación de derechos políticos para un sector de la oposición) de su dimensión ética (estado y conducción opositora).
Del lado pragmático, explica, las primarias representan una elección del candidato «que va a representar a la oposición o a la sociedad civil, como lo queramos ver. Para eso se concibió en el año 2012, que fue la primera experiencia de esa naturaleza, y para eso se plantea en el 2022 y 2023, proceso que culminó este domingo».
En el sentido ético, señala el profesor de la USB, «hasta ahora la conducción de la oposición por parte de los líderes que hasta ahora habían estado en la palestra ya no está vigente, independientemente de que lo hablemos un día antes de la primaria o un día después (…) Si la sociedad está diciendo claramente y a los cuatro vientos que se está buscando a una persona que es disidente de lo que ha venido siendo hasta ahora la conducción de la oposición o de la Plataforma Unitaria, obviamente se le tiene que dar paso a la preferencia de la sociedad electora».
Considera que este «liderazgo», naturalmente, debe dar un paso al costado. «Retirarse y dejar que el nuevo liderazgo pragmático se convierta en un liderazgo ético de la oposición y que sea quien conduzca un poco los derroteros no solamente de la campaña electoral presidencial, sino de las estrategias de la oposición para llegar hasta allá».
En esto coincide la politóloga Ana Milagros Parra. «Sí debe tener un peso María Corina Machado dentro de la oposición, en toma de decisiones e incluso como liderazgo porque la población la escogió».
Eso no significa que va a ser un jefe, dice la politóloga, pero sí un liderazgo que se debe reconocer. En este punto, señala que es el deber ser «si son un grupo democrático y respetan el resultado de un proceso tan importante como son las primarias. El resultado de las primarias va a reconfigurar cómo actúa la oposición y dentro de eso está la Plataforma Unitaria».
La politóloga también destaca que los mecanismos de toma de decisiones y resolución de conflictos dentro de la Plataforma Unitaria «ya deberían haberse creado, porque una de las cosas que le falta a la oposición son estos mecanismos para que no pasen esas disputas y que la gente diga ‘esta es la misma oposición de siempre y no están organizados’».
Por su parte, el politólogo Carlos Raúl Hernández descarta como opción viable una candidatura de María Corina Machado, pues afirma que no podrá inscribirse ante el CNE. «Ella sencillamente no puede ser candidata porque está inhabilitada. Jorge Rodríguez lo confirmó. No hay que crear falsas expectativas, y no me queda otra que decir que ella no puede ser candidata».
Dentro de la oposición, señala como candidaturas viables a Manuel Rosales (UNT), el independiente Benjamin Rausseo y Luis Eduardo Martínez (de la fracción de AD intervenida).
Inhabilitación: el punto clave
Las medidas impuestas por la Contraloría General de la República no solo afectan a la ganadora. Freddy Superlano se retiró de las primarias para dar su apoyo a Machado, y Henrique Capriles reconoció el peso de una inhabilitación en sus aspiraciones.
La negociación retomada en Barbados jugará un papel importante, al igual que Estados Unidos, que condiciona el relajamiento de algunas medidas contra Venezuela por un cronograma electoral presidencial, ruta clara para levantar inhabilitaciones y liberación de presos políticos venezolanos y estadounidenses.
El profesor Daniel Varnagy afirma que al día de hoy se desconoce qué pasará con ese tema. «Con un ganador inhabilitado, hay que trazar las estrategias sabiendo que la inhabilitación es írrita, que forma parte de las negociaciones de otras cosas con otros países y no solamente con el gobierno venezolano».
De la narrativa de la inconstitucionalidad de las inhabilitaciones actuales, señala Ana Milagros Parra, «la oposición debe tomar su narrativa. La primaria es un hito que depende de cómo resulten va a determinar el orden opositor posterior, que evidentemente va a tener un puesto y un liderazgo en cualquier puesto que tenga la oposición, incluyendo la Plataforma Unitaria».
En esto coincide Varnagy. «Esa candidatura (Machado) ya no es solamente una candidatura con características locales, sino que va a tener características globales porque la inhabilitación está siendo tratada de manera más discreta o menos discreta como lo queramos ver dentro de las negociaciones que se están sucediendo».
Altos personeros del gobierno insisten que Venezuela es un país soberano y no acepta injerencia en este u otros temas. Para Varnagy es una verdad parcial. «Cuando se está en un proceso de negociación que no es solo local entre gobierno y oposición, sino entre distintos países que están participando de ese proceso, el resultado de una elección tiene una connotación que es supranacional».
Los intereses de EEUU en el petróleo venezolano lo obligan a forzar a un cambio de sistema en el país, dice el doctor en Ciencias Políticas. «Y lo va a hacer de la manera más elegante, la más discreta posible. Ya no estamos en los años 80 del siglo pasado».
Machado, ¿dentro o fuera de la negociación?
Un punto que no queda fuera de la ecuación de la ganadora son las negociaciones entre la Plataforma y la administración de Nicolás Maduro. El pasado 17 se firmó un acuerdo sobre garantías electorales y derechos políticos que, si bien no zanja la cuestión de las inhabilitaciones, abre una puerta para ello.
Estados Unidos también se sumó como actor en ese punto, al condicionar licencias temporales para que Venezuela retome operaciones en materia de gas, petróleo y minería a la consecución de un cronograma electoral, una ruta clara para levantar estas medidas y la liberación de presos políticos.
El politólogo Carlos Raúl Hernández expresa sus reservas ante la negociación por las declaraciones ofrecidas desde el oficialismo y el propio Estados Unidos en los últimos días sobre uno de los puntos cruciales: las inhabilitaciones. «Estamos en un momento muy difícil de entender, no es una cosa que se acaba de firmar (…) El acuerdo permanece estático hasta que concurran ambas partes en ese punto».
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Daniel Varnagy señala que más allá de los aciertos y resultados del grupo negociador de la Plataforma Unitaria se debe recordar que carecen de legitimidad de origen.
«La sociedad venezolana en ningún momento eligió a estos negociadores. Estos negociadores salen de una Plataforma Unitaria que, por cierto, está bastante desactivada, es decir, varios de los partidos que hacen o hicieron vida retiraron a sus candidatos de las primarias», destaca.
El profesor de la USB y la politóloga Parra coinciden en que el ganador debe tener su representación en la mesa. Varnagy asegura que el partido del ganador, en este caso Vente Venezuela, tiene que tener representación claramente visible en los próximos pasos de las negociaciones.
Lo que viene para la Plataforma Unitaria
La politóloga Ana Milagros Parra destaca que el paso de la inscripción de María Corina Machado ante el CNE «hay que verlo después. La persona que gane va a tener que negociar y ponerse de acuerdo con la oposición democrática para ver qué se hará después. El primer paso debe ser luchar para que todas las inhabilitaciones inconstitucionales se levanten, pero de no ser el caso, esa persona que gane debe tener voz y voto en el plan B, que puede ser una sucesión».
Mientras que Daniel Varnagy señala que quienes queden de segundo, tercero o de cuarto lugar tienen una responsabilidad integradora y no divisora. «Pueden querer decir ‘yo no reconozco el resultado’. Eso puede pasar y eso sería lo peor que pudiera pasar. Ahí es donde uno espera, aspira y anhela la sensatez».
Tampoco considera que estas posiciones sirvan para resolver el tema de si el candidato inhabilitado no logra inscribirse frente al CNE. «Se estaría banalizando un tema de representación social. El sustrato de toda la primaria es un sustrato ético, no es un tema banal. Es parte posible de una estrategia que se ceda a otro, pero de ninguna manera debe ser vista como una primera opción porque significaría que el liderazgo venezolano de oposición no tiene la capacidad de trazar estrategias más allá de lo banal, de lo evidente. Como sociedad tenemos que poder ir mucho más allá».
Carlos Raúl Hernández destaca que hay opciones como Delsa Solórzano o Andrés Caleca que tienen un apoyo minoritario y no serían opciones electorales reales. «Incluso el mismo Caleca declaró que él se va a poner al día siguiente de las primarias a buscar acuerdos entre todos los candidatos, eso está muy bien, pero hay que tener un mínimo de presencia nacional para aspirar seriamente a la Presidencia de la República».
¿Qué decían los candidatos?
El apoyo a una inhabilitada tuvo condicionales entre los candidatos a las primarias. La falta de acuerdo frente a un mecanismo de reemplazo, en caso de que María Corina Machado no logre inscribirse como la presidenciable ante el Consejo Nacional Electoral, fue parte de los reclamos de un grupo.
La independiente Gloria Pinho y el abanderado de UPP 89, César Almeida, formaron parte de ese grupo. La abogada incluso dijo que una persona que resulte electa con un bajo margen de votos «no tendrá legitimidad necesaria» para asumir el liderazgo de toda la oposición venezolana.
La candidata a la primaria, Gloria Pinho, enfatizó que de perder la elección no apoyaría a un ganador inhabilitado. pic.twitter.com/TX0eRbosMF
— Darvinson Rojas Sánchez (@DarvinsonRojas) October 22, 2023
Carlos Prosperi, candidato de Acción Democrática, fue otro de los que reclamó una ruta frente a las inhabilitaciones, aunque señaló que si un candidato con este tipo de medida resulta ganador «tiene que tratar de luchar por (restituir) sus derechos, pero si hay una agenda de salir a las calles, de no construir una ruta electoral, con nosotros no van a contar porque ya en el pasado vimos situaciones lamentables».
El partido de Prosperi pidió suspender el proceso y posponerlo debido a irregularidades que no fueron subsanadas por la Comisión Nacional de Primaria. El mismo candidato intentó desconocer los resultados pero su posición fue desdeñada por el partido.