Políticos rechazan iniciativas de Borrell y piden a la UE apoyar acciones contra Maduro
La UE, de acuerdo a ABC, estaría dispuesta a mandar una misión de observación internacional al país si se retrasan las elecciones
Un grupo de más de 200 personalidades de Iberoamérica enviaron una carta a la Presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; al Presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; y a los 27 ministros de Relaciones Exteriores agrupados en la Unión Europea (UE) para repudiar las acciones que, según su opinión, lleva a cabo el alto representante del bloque europeo para la Política Exterior, Josep Borrell, junto con el gobierno de España respecto a la crisis venezolana y las elecciones parlamentarias.
El grupo, encabezado por la coordinadora de Vente Venezuela, María Corina Machado, el exalcalde Antonio Ledezma, y otros políticos venezolanos junto a varios expresidentes como Andrés Pastrana y Vicente Fox, al igual que los presidentes del Partido Popular español -con representación en el Parlamento Europeo- y VOX considera que las acciones que lleva a cabo Borrell están minando el consenso internacional sobre la necesidad de establecer un gobierno transitorio en Venezuela y avalar la «farsa electoral».
La misiva califica las acciones de Josep Borrell como una «misión incongruente» que «obstaculiza el rescate» del país y creen los firmantes que las gestiones del político europeo van en detrimento de los acuerdos y pronunciamientos que la misma UE ha realizado en el pasado, así como las posturas esgrimidas por la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Grupo de Lima, quienes han rechazado la realización de las elecciones.
Este comunicado obvia lo afirmado por la portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior, Nabila Massrali, quien había desmentido las acusaciones del PPE sobre el envío de una misión exploratoria «clandestna» a Venezuela por parte de Borrell, cuando en una rueda de prensa aseguró que el envío de la misión «se ha hecho en el marco de su trabajo diplomático y se ha informado a los estados miembros antes de viajar»
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A juicio de los firmantes del comunicado liderado por Machado, también lo que están haciendo es «solventar» las violaciones a los DDHH en Venezuela con la sola prórroga de los comicios pautados para diciembre y la búsqueda de unas «condiciones mínimas» que permitan su realización.
En ese sentido, insisten en que avanzar con esos requerimientos representaría una violación más a los DDHH, ahora promovida por la comunidad de naciones europeas que ha liderado históricamente la defensa de los derechos humanos.
Finalmente, los firmantes indican que si la Unión Europea duda sobre aspectos como la violación de DDHH, la ausencia de soberanía y presencia de personal cubano, iraní y grupos terroristas, así como la vinculación del régimen de Nicolás Maduro con actividades del narcotráfico, debería conformar una comisión de verificación de hechos para informar al Consejo de Europa y a los gobiernos de la Unión sobre estas premisas.
Por esto, instan a la comunidad europea a desmarcarse de los intereses del gobierno de España, así como a promover la actuación de la Corte Penal Internacional junto a la OEA y otros organismos que aceleran las medidas necesarias para desalojar al régimen de Nicolás Maduro, días después que la Misión de Verificación Independiente de la ONU vinculara al mandatario venezolano con crímenes de lesa humanidad
El alto representante de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, envió una misión a Venezuela para intentar negociar con el gobernante Nicolás Maduro aplazar las elecciones legislativas, fijadas para el 6 de diciembre por el Consejo Nacional Electora (CNE), designado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), unos seis meses.
Según una nota publicada por ABC a última hora del miércoles 23 de septiembre, Borrell se reunió con Pedro Sánchez y luego envió a la misión a Caracas. El medio reseñó que si Nicolás Maduro acepta ese retraso, la UE estaría dispuesta a mandar observadores internacionales y darle apariencia de normalidad democrática a unos comicios en los que los principales líderes opositores no pueden participar por estar presos o huidos del país.
Dos días antes, es decir el lunes 21 de septiembre, dijo que hay una «ventana de oportunidad» para que el bloque de países envíe una misión de observadores a las elecciones parlamentarias, pese a reiterar que aún no se dan las condiciones para ello.
«Por el momento no se cumplen las condiciones, pero seguimos pensando que hay una ventana de oportunidad», indicó Borrell en rueda de prensa al término de un Consejo de ministros de Exteriores de la UE.
Para el 25 de septiembre, Josep Borrell, aclaró no sostener ningún tipo de negociación con el gobierno de Nicolás Maduro, y que el bloque «está lejos» de designar una misión de observación electoral a Venezuela, después de que se revelara que enviara un grupo exploratorio al país sudamericano.
Las declaraciones de Borrell responden a una carta enviada por el Partido Popular Europeo (PPE), en la que se cuestionaba la decisión de enviar una misión a Venezuela, ya que cualquier forma de legitimación al chavismo sería un «error estratégico que blanquearía un régimen tiránico».
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Sin embargo, se conoció que sí hubo una misión enviada al país. Incluso, sostuvieron reuniones por separado con representantes de la administración de Maduro, el exgobernador Henrique Capriles y la oposición venezolana encabezada por Juan Guaidó. También se reunieron con con partidos minoritarios partícipes de la Mesa de Diálogo Nacional con el gobierno de Maduro, que participan del proceso comicial con las condiciones actualmente planteadas, el cardenal Baltazar Porras, administrador apostólico de la Arquidiócesis de Caracas y representantes de la sociedad civil.
Desde que Josep Borrell fungía como canciller de España bajo el gobierno del socialista Pedro Sánchez, ha estado impulsando la iniciativa del Grupo Internacional de Contacto, con el fin de buscar por vías diplomáticas y la negociación una salida a la crisis de Venezuela. Por otro lado, la nación ibérica se ha mostrado vacilante respecto al reconocimiento de Guaidó como presidente interino al ser recibido en 2020 por la canciller Arancha González Laya en vez de Sánchez, lo que rompió con la seguidilla de mandatarios que sí reconocieron al parlamentario, entre ellos el mismo Donald Trump.
Luego de la postura de Henrique Capriles de respaldar la realización de elecciones y ayudar a mediar para que se «indultara» a 110 personas, las acciones de Borrell han sido más orientadas a buscar esas concesiones para encontrar una vía pacífica que permita dirimir el conflicto político en Venezuela.
