Presidente Ortega tendría la «cosa fácil» para que se acaben las protestas en Nicaragua
El problema que se suscita en Nicaragua puede tener un desenlace parecido al que ocurrió en Venezuela durante las protestas antigubernamentales de 2017
La directora interina del Instituto GIGA de Estudios Latinoamericanos en Hamburgo, Sabine Kurtenbach, lleva un intenso estudio de la gestión del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, así como cuáles son sus intenciones en torno al conflicto político que se registra en esa nación desde hace algunos meses.
A juicio de Kurtenbach, Ortega no espera que las protestas lo saquen de la primera magistratura de forma inmediata, por lo que estimó que las protestas antigubernamentales que se vive en esa nación continuarán escalando y el llamado a elecciones que hiciera el Ejecutivo es solo una opción «para salvar las apariencias», entendiendo que el requerimiento para que cesen las manifestaciones es que él y su esposa salgan del poder.
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Es de la opinión de que la oposición en Nicaragua es muy débil, lo que podría obrar a favor del mandatario para asirse una vez más del poder y de forma más férrea. «Ya lo vemos en Venezuela, cuánto puede durar un régimen si no hay un frente de oposición común», señaló según un artículo publicado en el site de la DW.
Por otra parte, insiste en que una intervención armada por parte de Estados Unidos solo beneficiaría al gobierno de Daniel Ortega, si se tiene en cuenta el contexto histórico que envuelve a esas dos naciones: «las intervenciones estadounidenses tienen una tradición: desde la ocupación de principios del siglo XX hasta el financiamiento de los contras en la década de 1980», recordó.
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Si se toca la arista de la posible ayuda de la Unión Europea, la experta en temas Latinoamericanos considera que la misma puede ser limitada porque «La UE no tiene más influencia que los obispos nicaragüenses, que en tal caso, así como en otros países de Latinoamérica, representan la mejor opción de mediación posible».
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