Rafael Ramírez dice que la FAN es la única que puede evitar la violencia en el país

Para el expresidente de Pdvsa, el órgano castrense en la única institución con la capacidad para impedir «que se instale la violencia en nuestro territorio, tanto por conflictos de orden interno, como por una agresión extranjera»
Autor: El Pitazo
La Fuerza Armada Nacional es el gran árbitro en la actual coyuntura política del país, afirmó el expresidente de Pdvsa, Rafael Ramírez, en el artículo titulado «La soberanía reside en el pueblo», publicado el domingo 13 de enero.
“La Fuerza Armada Nacional Bolivariana, al tener el monopolio de la violencia, es la única capaz de evitarla, además de ser la única institución con la capacidad para impedir que se instale la violencia en nuestro territorio, tanto por conflictos de orden interno, como por una agresión extranjera.”, escribió.
Para Ramírez, a partir del 10 de enero de 2019, “con la autoproclamación de Maduro”, y la posterior actuación de la Asamblea Nacional, “la situación política de nuestro atribulado país, llega a una encrucijada y a un punto de inflexión definitivo para nuestro futuro”.
Considera que más allá de un problema legal o de materia Constitucional, existe un problema político.
“Maduro asume un nuevo período presidencial sin legitimidad para ello, se juramenta ante un Tribunal Supremo de Justicia, igualmente ilegítimo y ante la presencia de poderes, también cuestionados”, señaló.
Indicó que sólo el pueblo venezolano tiene legitimidad para conducir al país, “según lo establece el artículo 5to de la Constitución, aunque es evidente que se le ha negado la posibilidad de ejercerlo. Tanto por la trampa como por la violencia, se ha usurpado el poder originario del pueblo. Por ello se requiere de una acción política, de activa movilización popular, que restablezca el principio Constitucional de que la Soberanía reside en el pueblo. Que le ponga punto final a este desastre y que sea capaz de evitar el asalto del fascismo”.
Subrayó que Maduro carece de legitimidad de origen no solo porque su mandato surge de una elección fraudulenta, sino que ha perdido su legitimidad al incumplir las obligaciones inherentes al cargo para el que fue nombrado: “se ha desviado de sus fines y funciones, del objeto de su investidura y ha violentado de manera reiterada la Constitución vigente, en particular, los derechos fundamentales, humanos y políticos de todos los venezolanos y venezolanas consagrados en ella”.
“Ha fallado en su obligación de “cumplir y hacer cumplir la Constitución y las Leyes”, en particular, en el ámbito económico: la soberanía sobre el petróleo, el carácter inalienable, inembargable e imprescriptible de nuestras reservas petroleras y mineras, el funcionamiento del BCV,, y en general, de la totalidad de la institucionalidad del Estado: El Poder Judicial, el Poder Moral y el Poder Electoral, han sido convertidos en apéndices del gobierno y han convalidado la reiterada violación de nuestra Constitución y nuestras leyes”, agregó.
Ramírez también cuestionó la actuación de la Asamblea Nacional. “La Asamblea Nacional actúa ilegalmente, al autoproclamar un “Presidente de la República”, sobre una declaración de “falta absoluta” del presidente con base en una sentencia emitida por el “Tribunal Supremo de Justicia con sede en el Exterior” que, evidentemente, no cumple con lo establecido en nuestra Constitución, por lo cual, sus actuaciones carecen de legitimidad”, indicó.