Raúl Baduel permanece aislado y sin siquiera tener una Biblia en Fuerte Tiuna
Baduel se encontraba detenido desde 2017 en «La Tumba», como se conoce al Sebin Plaza Venezuela, después de que cumpliera condena en Ramo Verde desde 2009 hasta 2015
Los familiares del general retirado del Ejército Raúl Isaías Baduel pudieron visitarlo en las instalaciones de la Policía Militar, ubicada en Fuerte Tiuna, tras mes y medio de desaparición forzada.
En un vídeo posteado en sus redes sociales, Margareth Baduel, una de las hijas del preso político, denunció que el militar permanece totalmente aislado de los detenidos en Fuerte Tiuna, el principal regimiento del país, con movilidad reducida dentro de la celda y tampoco tiene acceso a libros.
Explicó que pudieron ver a su padre «en una sala de entrevistas, por medio de un vidrio, y nos comunicamos por él a través de un teléfono. Él está siendo sometido a un aislamiento total y permanece las 24 horas del día en un espacio reducido donde ni siquiera le permiten tener la Biblia».
Para la hija del general retirado, este tipo de encierro busca «quebrantar sus convicciones, principios, valores, dignidad y fe».
Hasta los momentos, no tiene establecido un régimen de visitas y por tanto, sus familiares desconocen si la visita del domingo 21 «fue solo una fe de vida», al tiempo que destacó que continuarán denunciando» todas estas violaciones a los derechos humanos y reiteramos que el régimen de Nicolás Maduro es responsable de lo que ocurra con nuestro padre y nuestra familia».
El 12 de junio, los familiares del exministro de Defensa denunciaron que había sido trasladado desde la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), ubicado en Plaza Venezuela, y de manera extraoficial había sido llevado a Fuerte Tiuna, pero en ese sitio les negaron información sobre su paradero hasta el 21 de julio.
Baduel se encontraba detenido desde 2017 en «La Tumba», como se conoce al Sebin Plaza Venezuela, después de que cumpliera condena en Ramo Verde desde 2009 hasta 2015 por supuesta corrupción dentro de la Fuerza Armada Nacional. A partir de esa fecha, se le sometió a un régimen de libertad condicional que fue revocado hace dos años, tras ser señalado por presunta instigación a la rebelión y traición a la patria.
El caso del general retirado y las presuntas torturas a las cuales ha sido sometido durante su prisión fue denunciado por sus familiares a la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, durante su visita al país en junio.
En un informe sobre la situación de los DDHH en Venezuela, publicado el 4 de julio, la Alta Comisionada solicitó la liberación de los presos políticos e hizo al Estado un llamado para detener, condenar públicamente, castigar y prevenir los actos de persecución y represión selectiva por motivos políticos, dentro de los que incluyó la retórica estigmatizadora y las campañas de desprestigio.
Además, Bachelet pidió la adopción de medidas concretas para proteger a los defensores de los derechos humanos y a los profesionales de los medios de comunicación.