Recurrencia de derrames petroleros lleva al país a una emergencia
El activista ambiental Gabriel Cabrera informó que calculan un aproximado de 10 kilómetros de mancha de petróleo solo en Cabimas y partes de Ciudad Ojeda, luego del reciente vertido del fin de semana
El director del Centro de Activismo y Desarrollo Democrático (CDDLatam), Gabriel Cabrera, documentó uno de los recientes derrames petroleros de la Costa Oriental del Lago (COL) en el estado Zulia, afirmando que el daño al ecosistema es «bastante grande».
Cabrera afirmó en el programa De primera mano, de Radio Fe y Alegría Noticias, que son tan graves y recurrentes los derrames petroleros que la situación puede empeorar y convertirse en más que una emergencia.
El pasado 21 de noviembre en Cabimas y Ciudad Ojeda, municipios de la COL, se registró un nuevo vertido de líquido negro en las orillas del lago.
También este lunes 28 de noviembre se presentó otra mancha de líquido en Bachaquero, capital del municipio Valmore Rodríguez, según denunció en Twitter Eduardo Klein, profesor del Departamento de Estudios Ambientales de la Universidad Simón Bolívar (USB).
«Nos enfrentamos a una emergencia ambiental que puede convertirse en una emergencia climática con impacto directo en la sociedad civil de la zona», afirmó Cabrera.
El impacto de los derrames
Cabrera señaló que medir el daño del derrame es complejo para las organizaciones no gubernamentales y agregó que debería ser la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) quien lo haga como ente encargado, pero no lo hace.
A estimaciones de Cabrera, basándose en las imágenes satelitales proporcionadas por el profesor de la USB, se puede calcular un aproximado de 10 kilómetros de vertido de petróleo solo en Cabimas y partes de Ciudad Ojeda.
Han ocurrido derrames en el lago de Maracaibo que provienen de la refinería Bajo Grande en la Costa Oriental y afecta a Maracaibo y otros municipios de la región zuliana, explicó.
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«Nosotros no podemos determinar con exactitud el momento en el que ocurre el derrame porque son sistemáticos y ocurren constantemente», dijo el activista, que agregó que tampoco se puede calcular la densidad del hidrocarburo.
Afirmó que es muchísimo más grande de lo que se cree y, además, la sociedad lo ha normalizado.