Miguel Salazar: «No vamos al parlamento a confrontar al gobierno»

La «lista nacional» del partido socialcristiano Copei está encabezada por su presidente nacional, Miguel Salazar. Desde la posición para la que fue designado por el Tribunal Supremo de Justicia ha asumido la organización de la tolda verde que afirma cubrirá un tercio de los testigos electorales de la Alianza Democrática en la que participa junto a AD, Avanzada, Cambiemos y Esperanza por el Cambio
Miguel Salazar fue designado como presidente del partido socialcristiano Copei por una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia, en 2019. Antes, formó parte de otras directivas de un partido que ha sufrido judicialización varias veces. Ahora, encabeza la «lista nacional» de la tolda verde y aspira ser diputado por cociente de participación.
Afirma, desde la sede nacional en Caracas, que durante estos meses se ha dedicado a reconstruir a Copei, una labor posible porque «el copeyano siempre ha estado atento a la organización, a la tarjeta, al voto, más allá de conductas de individualidades». Sostiene que la tolda «ya salió prácticamente de todos sus conflictos, que se iniciaron por tres amigos: Pedro Pablo Fernández, Luis Ignacio Planas y Roberto Henríquez que sacaron a Pérez Vivas y luego se pelearon entre ellos. Yo soy una consecuencia del problema de ellos. Por el TSJ han llegado todos los que han estado frente al partido. Ahora lo que hicimos fue abrir las puertas y vino mucha gente que estaba alejada».
En su oficina despacha bajo la mirada de Arístides Calvani y del expresidente Luis Herrera -«Rafael Caldera no es muy querido por aquí, tiene un salón con su nombre»-, mientras recibe reportes desde las regiones y afina detalles de una declaración de prensa con Enrique Mendoza, exgobernador de Miranda y jefe de campaña del partido. Desde allí dice a TalCual que la vía electoral es la única viable para el ciudadano y por eso hacen campaña con el «autobús de la esperanza». A Salazar no le gusta lanzar cálculos de cuántas curules pueden lograr el 6D, aunque la veintena no le suena descabellado.
Ingeniero y margariteño, afirma que encabeza sin buscarlo una lista que hubiese preferido protagonizara Eduardo Fernández, y reitera que su partido no buscará confrontar con Miraflores sino buscar soluciones acordadas a problemas de la gente, comenzando por la dolarización de salarios y pensiones.
-¿En esa recuperación de la marca Copei, qué encontraron al momento de construir listas y padrón electoral?
-Estamos haciendo un esfuerzo por recuperar. Mucha gente que se había ido con Unión y Progreso se devolvió, y ahora son candidatos de Copei o trabajan activamente en Copei. Hemos montado un equipo multidisciplinario a nivel nacional. El 31% del padrón nacional de testigos de la alianza lo cubre Copei. Los hemos chequeado, son de carne y hueso.
-¿Hay estados donde Copei se note más fuerte?
-Tenemos mucha fuerza en Táchira, Falcón, Monagas. Ha sido una grata sorpresa el estado Sucre. Hemos sido muy desprendidos porque le hemos abierto el partido a gente que quiere ser candidato. Donde no tenemos gente con perfil candidatural estamos promoviendo jóvenes. Creo que somos el partido que más jóvenes lleva al parlamento en cabezas de listas o puestos salidores con muchachos de menos de 25 años.
-¿Creen que el chavismo puede ser minoría en el resultado del 6D?
-Yo siento que sí, que va a existir el voto castigo, que esa población que está padeciendo y molesta va a expresarse, porque no puede hacerlo de otra manera. Arriba hay un Dios. No creo que Dios abandone a este pueblo que ha sido muy noble.
-Se dice que el rechazo a Maduro ronda el 80%. ¿Qué decirle al país si el 6D el PSUV gana la mayoría?
-Lo primero es que nosotros no vamos al parlamento a confrontar, sino a impulsar el cumplimiento de la constitución. Dentro de la constitución hay un elemento fundamental: el principio de colaboración entre los poderes públicos para alcanzar los fines del Estado. Si nosotros desde el Legislativo nos la vamos a pasar peleando con los otros poderes, no vamos a alcanzar los fines del Estado. El único perjudicado será la gente.
-Entre 2010 y 2015 el chavismo impuso su mayoría simple como si fuera calificada, para no acordar nada en la AN. Y de 2015 a 2020 ocurrió lo del «desacato». ¿Qué les hace pensar que el chavismo en la AN esta vez actuará distinto?
-Han pasado 20 años y el chavismo tiene que entender el fracaso de su política. Si no lo ve, el pueblo se lo tiene que hacer ver, y la única manera es que el PSUV reciba una derrota en las urnas. Pero si tenemos personas llamando a no votar, no podremos hacer nada. Estos amigos que llaman a no votar ahorita, mañana cuando quieran acceder al poder van a tener que rescatar el concepto del voto. Es una contradicción. El voto no puede ser usado solo cuando interesa.
-¿Pero qué les hace pensar que el chavismo actuará de manera distinta en la AN?
-Nada nos hace pensar eso. Es la parte racional del chavismo la que tiene que entender que el desastre de país los tiene que hacer pensar distinto. Si vamos a seguir endilgándole todos los errores al Imperio, bueno. ¿Pero de qué manera se le dice al pueblo? Desde el parlamento, desde la tribuna.
-¿Por qué marcar la tarjeta de Copei y no la de otros partidos adversos al PSUV?
-Porque no vamos al parlamento a pelear. Necesitamos que el pueblo nos brinde la confianza. Estamos pidiendo que voten por nosotros porque no vamos a ir a pelear, ni a insultarnos, sino para activar el principio de cooperación. Lo que queremos es legislar en función de todo el país. Hay muchas cuestiones económicas que hay que legislar, y hacerlo desde los más necesitados. No es populismo. Hay que adecuar muchas leyes al momento presente.
-¿La permanencia de Maduro en el poder no es un problema para Copei?
-Es un problema para el país, pero la única manera de poder salir de Maduro es que logres articularte en la oposición y no lo hemos hecho. La oposición no ha sido responsable y no se ha articulado.
-Los escenarios electorales son con un chavismo usando recursos públicos, mudando electores, cambiando centros electorales, inhabilitando candidatos, interviniendo partidos. En 2020 se ha dicho que las condiciones son mejores que en 2015. ¿Lo cree así?
-De verdad que las condiciones son mejores. Se eliminaron los puntos rojos. Tenemos testigos en centros de votación. Aún no sabemos cómo será el comportamiento del Plan República, pero hay una promesa de que va a hacer su función como debe ser. Hay la promesa de cerrar las mesas si no hay electores. Desde el punto de vista tecnológico, hemos estado en las auditorías y es imposible que te cambien el voto, pero hay que tener testigos en las mesas para que no añadan votos, como ha pasado antes.
-¿Tendrán acceso a los cuadernos electorales para poder determinar que no se añadieron votos?
-Con este sistema electrónico, va a ser difícil. El trabajo que nos hemos propuesto es tener todas las actas. Es un punto de honor en Copei. Nos estamos reuniendo operativamente en esta alianza de cinco organizaciones políticas para evaluar dónde nos faltan testigos, dónde tendemos que migrarlos para cubrir, etc.
-¿Han tenido conversaciones con las otras alianzas y partidos para ese trabajo de testigos?
-Ahí es donde está la magia. Siempre, independientemente de que no haya unidad en las candidaturas, nos ayudamos con el padrón electoral. Donde no tenga AD o Copei un testigo, lo va a tener Unión y Progreso, y eso lo vamos a estar monitoreando juntos.
-¿Por qué no se logró una alianza completa?
-Yo le ofrecí a Eduardo Fernández, a Mercedes Malavé, a gente de Copei, que fueran cabezas de la lista nacional. A mi no me gusta ni ir a la televisión. Pero resulta que ninguno quiso, se fueron a fundar otro partido. Además, Copei en muchos sitios tiene su dirigencia, pero todos los partidos querían ser cabeza de lista en los estados. Había que picar el país en 60 y no en 24 estados. Nosotros en Copei dijimos para tener cuatro cabezas de lista -y terminamos con ocho-, pero Claudio quería seis, Felipe quería cinco, Falcón otros tantos. Yo les decía que agarraran un estado y se enfocaran ahí.
Las propuestas que vamos a elevar al #ParlamentoNacional van en pro de una mejor calidad de vida para todos los ciudadanos en #Venezuela porque desde @Copei_Partido estamos empeñados en trabajar en la reconstrucción de un mejor país. pic.twitter.com/71J19Ybjda
— Juan Carlos Alvarado (@JCAlvaradoCOPEI) November 27, 2020
-¿Qué responde a la crítica de que la «lista nacional» no aparece en la Constitución?
-Es parte de la reinstitucionalización y de lograr mayor participación. Es una lástima que no se haya legislado sobre eso. La responsabilidad del parlamento no es solamente de la oposición sino del PSUV. Si Diosdado Cabello se pone de acuerdo, siendo minoría, de repente hubieran trabajado en armonía. Pero no hubo eso. Yo no quería que aumentaran la cantidad de diputados, nosotros ni siquiera estuvimos en la Mesa de Diálogo Nacional, nunca nos sentamos en la mesita.
-¿El objetivo superior es más importante que cumplir lo que dice la Constitución?
-La Constitución no establece un límite específico, no reglamenta la proporcionalidad. Eso le permite al Poder Electoral, producto de un acuerdo político, ejercer una reglamentación. Unos actores políticos acudieron a solicitar al TSJ por omisión legislativa, y metieron eso: los actores que estuvieron discutiendo eso de la creación de la lista. Es parte de la política. Ahora, cuando el TSJ, la Sala Constitucional, dictamina y ordena, es ley
-¿Sabe por qué son 48 diputados nacionales?
-Porque son 24 estados, dos por cada estado.
-Para este proceso vemos una suerte de «voto entubado» en las máquinas, donde primer se marca el partido y luego se ven los nominales por si el elector quiere cambiarlos. ¿Están de acuerdo con este sistema?
-No le voy a llamar entubado, no uso el calificativo, pero sí está bien porque le facilita el voto al elector. El mecanismo facilita el sistema de votación y evita la confusión. Quien tiene necesidad de votar cruzado, sabe cuál es su procedimiento. En estos tiempos, producto de la pandemia, no se tiene tiempo de alargar el proceso.
-El 6D no es reconocido por la comunidad internacional, Estados Unidos, Europa, Grupo de Lima, OEA. ¿Cómo actuar frente a eso?
-Tenemos que ir a tocar las puertas a todos, del Paramento Europeo, el Grupo de Lima, a todos. Hacerlos entender que no vamos a un proceso de confrontación con el gobierno nacional sino que queremos solucionar problemas. Vamos a pedirles, aprovechando el fuero, a la Comunidad Europea, a Joe Biden, que llamen a toda la oposición para que la una. El problema aquí no es el gobierno, que seguirá siendo maluco, sino que tenemos que ponernos de acuerdo todos para salir de Maduro solamente sino de este sistema.
-¿Cuál ha sido la incapacidad del liderazgo opositor para poner se de acuerdo?
-El exceso de vanidad.
-El 5 de enero de 2021 se asumirán diputados pero allí seguirá el llamado gobierno interino teniendo control de activos, con reconocimiento internacional y representación diplomática. ¿Cómo actuarán al respecto?
-Yo no lo califico como gobierno interino, ni al diputado Guaidó como presidente encargado de la República. El colega ingeniero es diputado y hasta ahí. No quiero ni opinar sobre eso porque apenas hacerlo es darle reconocimiento.
-Es una realidad política.
-Esta Asamblea Nacional, con los poderes que tiene, va a conformar lo necesario para rescatar todo eso que no puede quedar en manos de cuatro o cinco personas por capricho. Las responsabilidades de cada quien que las asuman.
-El chavismo ha dicho que la Asamblea Nacional tiene que abrir juicios a diputados de esta legislatura. ¿Qué opina al respecto?
-Eso no es atribución de la Asamblea, y comenzaríamos con el pie izquierdo arrancando con ese tipo de cacerías. Lo importante es llamar a la reflexión y ver cómo nos unimos para trabajar por el país. Y que sean los tribunales y la Fiscalía los que actúen, aunque no nos gusten. Parte del compromiso es la reinstitucionalización. Hay que nombrar un nuevo CNE para lo que se necesitará negociar, porque nadie va a tener las 2/3 partes.
-Puede caer de nuevo en omisión legislativa.
-Pero no es la idea.
-Ya el chavismo tiene una ley antibloqueo y aún no ha comenzado una nueva Asamblea Nacional.
–Eso es algo dicharachero, populista, que plantea es un secretismo. La constituyente es para transformar el Estado y redactar una nueva constitución, no para hacer leyes que es una tarea de la Asamblea Nacional. Eso no existe.
-¿Qué pasa si el TSJ dice que la ley antibloqueo es creada por un ente supraconstitucional y la AN no puede tocarla?
-No podemos hacer nada. ¿Qué podemos hacer ante ese grosero abuso del PSUV? Lo que tenemos que hacer es organizarnos como oposición.
Este #29Nov hacemos recorrido por Pariata estado La Guaira en busca de establecer un contacto directo y sincero con los venezolanos que esperan un cambio de país y un cambio de políticas que sí le permitan vivir como se merece #LaPeleaEsVotando este #6D pic.twitter.com/qGv3s7bXMP
— Partido Demócrata Cristiano COPEI (@Copei_Partido) November 29, 2020
-¿Cómo ha sido la campaña en pandemia, qué dificultades han tenido?
-Hemos sido muy responsables, hemos cumplido con las medidas de bioseguridad. Ha sido difícil económicamente, y hemos trabajado mucho en redes sociales. Conseguimos amigos de la democracia cristiana que aportaron recursos.
-¿Qué le dice al ciudadano sobre por qué votar el 6D?
-El único instrumento que tiene el ciudadano es votar. El ciudadano tiene que ver este desastre de 20 años, producto de esta gente, y no puede permitir que sigan ahí destrozando al país. La gran responsabilidad del país la tiene el ciudadano, que es el único que puede cambiar esto.
-¿Es posible una reunificación opositora post 6D?
-El mejor ejemplo lo tienen los mandamientos. Vamos a procurar el encuentro independientemente de la dureza con la que nos hayamos tratado. Amaos los unos a los otros, dice el jefe. Allí está el tema del perdón. Nos hemos dicho mucho, y tendremos que entendernos y avanzar. ¿Qué necesitamos? Una mediación. Yo los he llamado a todos, les he mandado mensajes, y no atienden. Por eso ratifico que el gran problema que tenemos es la vanidad.