Secretos y más secretos, por Gisela Ortega
El secreto indica lo que está oculto y es inaccesible a la vista y al conocimiento de los demás. Es así mismo lo que uno sabe o tiene, pero no se muestra a otros, permaneciendo reservado, oculto y no conocido. Pero muchas veces los secretos dejan de serlo, no se pueden callar y se convierten en noticia.
Cada ser humano posee su cúmulo de secretos propios y de secretos ajenos que le han sido confiados. Las personas discretas se guardan los suyos celosos de su intimidad; y callan los que le ha sido contado. Un secreto develado puede convertirnos en rehén de la persona en quien hemos confiado.
Hay muchas clases de secretos. Esta el secreto de Estado, donde los gobiernos a menudo intentan mantener cierta información reservada, acerca de diseños de armamento, negociaciones diplomáticas, tácticas, proyectos. La mayor parte de los países tienen alguna normativas obre secretos oficiales, cuyo objetivo es el de clasificar material de acuerdo con los niveles de protección necesarios.
Las organizaciones sociales, civiles, industriales, comerciales, deportivas e incluso culturales, -que van desde las multinacionales hasta las sociedades sin ánimo de lucro- guardan secretos para mantener ventaja competitiva. Los diseños de los productos bajo desarrollo, lista de clientes, preferencias en el consumo de ciertas mercancías, procesos de trabajo y de fabricación, son todos ellos información guardada bajo las leyes del secreto industrial.
Las sociedades secretas, emplean el secreto como una forma de atraer a potenciales miembros y crear entre los asociados una sensación de categoría. El secreto es una parte esencial del crimen organizado. Y guardar una estrategia en secreto es importante en muchos aspectos de la teoría del juego.
Hay el secreto de la confesión en el catolicismo para el desahogo de nuestros secretos.
¿Cuáles son los secretos que Guarda el Vaticano? Asesinatos, conspiraciones, profecías ocultas, documentos nunca revelados… “En el Vaticano, lo que no es sagrado, es secreto”.
El primer intento de asesinato del Papa Juan Pablo II, tuvo lugar el 13 de mayo de 1981, en la Plaza de San Pedro, de la Ciudad del Vaticano: el terrorista turco Alí Agca le disparo 4 veces.
En el año 1983, el Papa Juan Pablo II tuvo un encuentro con Alí Agca en la prisión donde estaba preso, se vieron y hablaron en privado. Luego de su entrevista el propio Papa declaro a los medios de comunicación que aquel encuentro era -“un secreto” que no me pertenece y debo respetar”-.
El Sumo Pontífice le había relatado al entonces Cardenal y hombre de su confianza Luigi Poggi, los pormenores de dicha conversación. A su vez, Poggi había redactado un informe en donde detallaba los puntos tocados en esa extraña reunión. El documento actualmente se encuentra en los archivos vaticanos y tiene la categoría de Secreto Pontificio, es decir, que nadie, salvo el Papa, puede leer, publicar, difundir o dar a conocer el citado expediente al público.
Los archivos secretos del Vaticano esconden información valiosa y trascendental y guarda documentos importantes para la historia como son los primeros evangelios prohibidos o los que hasta la fecha son considerados apócrifos y no son conocidos ni por investigadores ni estudiosos, así como diversas actas firmadas, cartas y documentos de la diplomacia vaticana, entre éstas las más importantes la petición de la anulación matrimonial del Rey Enrique VIII de Inglaterra cuya negación provocó el rompimiento de las relaciones entre el Vaticano y Gran Bretaña, así como documentos del Papa Pío XII y sus presuntos lazos con el nazismo en la Segunda Guerra Mundial.
Es más, el último investigador que tuvo el permiso de indagar los archivos fue el historiador británico, John Cornwell, quien con la escusa de escribir una monografía biográfica del citado padre publicó en 1999, el libro titulado “El Papa de Hitler”, hecho que provocó polémica dentro de la Iglesia Católica. A partir de esa fecha, el Vaticano consideró que los documentos podrán ser solicitados luego de 70 años de ocurridos los hechos a examinar.
Los archivos del Vaticano, completan cerca de 50 kilómetros de estanterías, comprendidos por más de 50 mil volúmenes de los cuales miles aún se encuentran sin clasificar, es decir, que su contenido aún no ha sido revisado ni siquiera por los propios miembros del Vaticano incluido el propio Pontífice.
El secreto sumarial es el que pesa sobre las diligencias del sumario hasta que se abra el juicio oral. Otras leyes requieren a las organizaciones que guarden sus investigaciones en completo secreto, como la información médica, o los estudios financieros. Y están los documentos secretos, negocios secretos, decisiones seretas, pagos secretos y conversaciones secretas.
No podemos olvidar los secretos de alcoba que sirven para prodigar o acumular secretos –y están esos famosos amores secretos-, como el de Thomas Jefferson (1743-1826), tercer Presidente de los Estados Unidos, acusado de haber tenido una extensa relación intima con una de sus esclavas, Sally Hemings, con quien tuvo seis hijos, cuatro de los cuales sobrevivieron.
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Y debe considerarse el voto secreto, que es una garantía del sistema electoral que impide que un tercero pueda conocer su voto y tratar de influir en él. El propósito del sufragio es conseguir un voto libre e incondicionado, en el que solo cuenta la soberana voluntad del elector.
Tenemos servicios y agentes secretos indispensables en todos los gobiernos.
Hay quienes llevan sus secretos a la tumba. Y los secretos a voces, que no son ya para nadie, y se refieren a asuntos que todo el mundo sabe pero habitualmente disimula saberlo, El secreto mejor guardado por las mujeres es su edad y el más deseado, por todos, el de la juventud.
En estos nuevos tiempos, se han creado en las empresas tecnologías para los secretos. La preservación de los secretos tiene sus objetivos centrados en la actualidad en la garantía de la información. Las técnicas incluyen seguridad física y criptográfica. Convierte esos datos en testimonios indescifrables con el fin que extraños no puedan leer el contenido de las investigaciones.
Asimismo para prevenir el robo de informes secretos por parte de terceros, se utiliza el proceso de encriptación y posterior decodificación de archivos e investigación mediante un método que funciona en base a algoritmos. Convierte esos datos en testimonios indescifrables con el fin que extraños no puedan leer el contenido de las investigaciones.
Pero a la larga los secretos salen a la luz. O los pierde el transcurrir del tiempo y las generaciones.
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