«Si hubiésemos cumplido el 50% de la Constitución no tendríamos los problemas actuales»
La exconstituyente y exgobernadora de Portuguesa Antonia Muñoz, asegura que no entiende la urgencia en convocar al poder originario si luego de 15 meses aun no se conoce el proyecto de una nueva Carta Magna ni acciones concretas para enfrentar la situación económica del país
Antonia Muñoz fue -y sigue siendo- una vehemente partidaria de la gestión del presidente Hugo Chávez. Fue parte de la Asamblea Nacional Constituyente de 1999, que redactó la Constitución vigente, y gobernadora del estado Portuguesa en dos ocasiones. No obstante, sus críticas a la marcha del proceso luego del deceso del mandatario llevaron a la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela a no darle apoyo a sus nuevas aspiraciones para a regir esa entidad, e incluso a dejarla fuera de la directiva de la organización.
Pero lejos de bajar la voz, Muñoz continúa haciendo observaciones a la gestión de Nicolás Maduro y hoy, aunque estuvo a favor en 2017 de convocar una Asamblea Nacional Constituyente, sostiene que no entiende la urgencia de llamar al poder originario si luego de 15 meses no se conoce el trabajo de una nueva Carta Magna y tampoco se ven acciones concretas para enfrentar la precaria situación por la que atraviesa el país.
“Si a mí me preguntan si se necesita ir a una constituyente para cambiar la Constitución diría que no; ese proyecto no es responsable de la situación que estamos viviendo. Si ese proyecto de país (la Carta Magna vigente) lo hubiéramos cumplido en un 50 por ciento no tendríamos los problemas económicos ni éticos que tenemos en este momento”, expresó la profesora universitaria en entrevista con TalCual.
Argumentó diciendo que no hay nada en la Constitución que impida hacer las cosas correctamente y especificó que, en materia económica, el artículo 114 permite atacar la especulación, la usura y la cartelización. “Ahí se establece que serían penados por la ley, que es la de Precios Justos. Uno de los problemas más fuertes que tenemos es la especulación. ¿Había que hacer algo especial? No creo. Los artículos que tienen que ver con el desarrollo agropecuario, a partir del 305 en adelante ¿acaso allí faltaba algo en términos de la producción, la distribución y la comercialización que tuviera que ser cambiado para que se manejara la agricultura con mayor eficiencia?” Se preguntó durante la conversación.
– ¿Cómo compara el funcionamiento de la ANC de 1999 con la actual?
– Es un enfoque totalmente distinto. En 1999 fuimos a elaborar un proyecto de país. Aquí no estamos claros a qué se fue. Se han aprobado algunas leyes. No es la discusión de la plenaria de la constituyente el presentar los trabajos de las comisiones. Hay una diferencia de objetivos y del período, comenzamos en agosto (de 1999) y el 15 de diciembre (mismo año) se convocó a referendo fueron cuatro meses.
– Incluso el presidente Hugo Chávez mandó a apurar el debate
– Él quería un marco constitucional adaptado a las nuevas circunstancias. Llamó a elecciones aun cuando apenas tenía en el cargo desde febrero de 1999 y no tenía por qué ir a elecciones, quiso renovar las autoridades con ese nuevo texto. Ahorita una de las razones que daban era la situación económica. Entonces se suponía que deberíamos tener urgencia en modificar lo que ellos consideraban debía modificarse para que permitiera que la economía pudiera fluir de manera distinta, pero luego que se instaló la constituyente no he visto esa emergencia en relación a lo económico. Ahí tenemos una diferencia diametralmente opuesta. La constituyente de 1999 fue un foro abierto a todo el país. Los objetivos… Aquí no está muy claro por qué se convocó desde el punto de vista de la Constitución, específicamente lo económico que es lo acuciante de nuestra sociedad actualmente. Llevan casi cuatro veces el tiempo que se llevó hacer la Constitución de 1999.
– ¿Y en cuanto a actuaciones en específico de la ANC, como el nombramiento del Fiscal General de la República, el allanamiento a la inmunidad parlamentaria de varios diputados y hasta la aprobación del Presupuesto nacional qué opina?
– Pudiera haber sido una razón comprensible (para convocar la ANC) el destrancar el juego (político) que estaba trancado entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, luego que llegó (el entonces presidente de la Asamblea Nacional) Henry Ramos Allup diciendo que en seis meses sacaban al Presidente, y luego los problemas que terminaron con el desacato porque habían juramentado a parlamentarios que habían sido vetados por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Esa era una razón para por lo menos legitimar por un tiempo algunas cosas urgentes, algo que no existía en 1999.
Muñoz añadió que, al ser declarada en desacato la AN, el mandatario no podía ir a presentar su memoria y cuenta, ni el presupuesto, tampoco pedir permiso para salir del país ni suscribir acuerdos internacionales.
“Yo tengo algo que decir en cuanto a esa AN en desacato, preguntar por qué está la Asamblea en desacato, (y es) porque la AN quiere estarlo. ¿Por qué nunca salió del desacato? Así como juramentó (a los diputados de Amazonas) debió, y voy a inventar un nuevo término, ‘desjuramentar’ a esos parlamentarios. Tengo la hipótesis de que Ramos Allup no sacó a la ANC del desacato porque no quiso hacerlo; a él le interesaba que se quedara así”, agregó.
Coincide también en que el TSJ debió emitir un dictamen sobre el caso de los tres diputados de Amazonas, “si se quedaba la oposición sin esos tres parlamentarios” o repetir el proceso electoral en esa entidad.
“Ese caso se quedó en el freezer (refrigerador). Hubo una especie de connivencia entre la oposición, por lo menos los que mandan en ella (y el oficialismo).
– La AN sostuvo en esa ocasión que los diputados, luego de ser proclamados tienen inmunidad y no podían ser desincorporados
– Ese juego tenía que destrancarse y se quedó así. Es un muy mal precedente y abona el terreno de la impunidad.
– Hay dirigentes que vienen del chavismo y han retirado el apoyo a Nicolás Maduro ¿Cómo ve usted la continuidad del mandatario para con las ideas de Hugo Chávez?
– El tratar de que las cosas fueran transparentes. Chávez cuidaba mucho de que por lo menos la gente supiera cuáles eran sus razones, dentro de la Constitución. Aunque algunos constitucionalistas defendieron la posición de que no había que preguntarle al pueblo si quería convocar una ANC, me hubiese sentido mucho mejor y más en consonancia con la manera de actuar de Chávez si se hubiese preguntado al pueblo si quería convocar una ANC. Yo voté por la constituyente, pensé que se podía destrancar el juego. Me quedó esa duda ‘in pectore’. Me imagino que cuando modifiquen la Constitución se la van a dar a conocer con antelación al pueblo para que conozca cuáles fueron las modificaciones que se hicieron y para que el pueblo diga si está de acuerdo o no.
– ¿Está usted de acuerdo entonces con que se debe convocar a referendo?
– Estoy de acuerdo, mucho más cuando se ha hecho a puerta cerrada. Aunque (el constituyente) Hermann Escarrá dijo que hay un 80% de avance (de la nueva Constitución) Diosdado Cabello asegura que no hay un proyecto, debieron haber ido informando paulatinamente a medida que iban proponiendo cambios, de manera que el pueblo lo vaya conociendo y discutiendo si es un avance o un retroceso.
Muñoz resaltó que el constituyente Escarrá afirmó hace dos semanas durante un encuentro con las comunas que, por el artículo 1 de la Constitución “debíamos hacernos matar” y que poco después Luis Britto García escribió un artículo de opinión titulado Venezuela inmunodeficiente, en el que asegura que existe un borrador de nueva constitución y se refiriere al contenido de ese primer artículo, que establece, entre otros aspectos, la inmunidad de jurisdicción: el derecho de los venezolanos a dirimir cualquier controversia en los tribunales del país y que habría sido eliminado del proyecto.
– Juan Barreto dice que ni Elías Jaua conoce el nuevo proyecto
– Los constituyentes deben conocerlo. Nunca le he preguntado a los constituyentes qué están haciendo ahí. Escarrá habló de la necesidad de darle rango constitucional a las comunas e incluso que las comunas podrían constituir una especie de cámara (del Parlamento) anterior a la de diputados.
– ¿En su opinión cómo hemos llegado a la situación actual del país y qué debemos hacer para salir de ella?
– Para mí es ineficiencia producto de la corrupción. Fíjate cuando el presidente (Chávez), el 20 de octubre de 2012, durante el Gabinete que se bautizó como el golpe de timón, habló de eficiencia o nada, estaba reclamando precisamente eso. Chávez estaba reclamando la ineficiencia, que es debida a varias cosas. A veces alguien es ineficiente porque no conoce la materia que está dirigiendo. Aprovecho para hacerle una reflexión a quienes gobiernan; hay gente que piensa que alguien que es buen gerente se puede desempeñar bien en cualquier área, pero debe tener conocimientos más que generales sobre esa área.
“Hemos cometido ese error. Muchas veces, por amiguismo, clientelismo, se cae en ese tipo de cosas ‘porque este es amigo y es leal es bueno’. Yo soy muy leal a Chávez y a las ideas que él planteó y soy muy comprometida con el proceso, pero no aceptaría que me pusieran a dirigir petróleo, por ejemplo”.
Otro factor que provoca la ineficiencia, en opinión de Muñoz, es que no se hace seguimiento y control de las actuaciones: “Cómo me explican a mí si hubo seguimiento y control de la planta de fertilizantes que se inauguró en Morón (Carabobo) el 17 de noviembre de 2014 donde hubo una inversión de dos mil 500 millones de dólares y se iban a producir 700 mil toneladas de úrea y al final íbamos a cubrir el requerimiento (demanda) interno e iba a quedar un millón 900 mil para exportar y resulta que la (producción) de caña (de azúcar) se quedó sin fertilizar.
La exgobernadora señala que se debe explicar qué pasó con esa planta: “Ahí se está encubriendo a alguien. Están comprometidas Pdvsa y Pequiven; es una gran ineficiencia. Ha tenido impacto en la producción de maíz blanco y maíz amarillo. Si hubiéramos hecho un seguimiento y hubiese habido un responsable… a quien no cumplió hay ponerle los ganchos”.
“A los compañeros que creen que brinqué la talanquera y estoy en la derecha les digo que soy la misma chavista de siempre. Yo no me la doy de santa pero los corruptos me caen re mal. La política es para servir y no para ser servido. Cuando dices la verdad estorbas ¿Soy yo la que no soy leal a Chávez y los que se han robado los reales de la República sí lo son?
– ¿Y sobre la solución a la crisis?
– Lo que sí sé es que debería oírse a los venezolanos que saben de economía, porque nada cuesta oír, no importa que sean afectos al proceso o de la oposición. Todos dijeron que los precios acordados iban a servir y no funcionaron. Dicen los productores que acuerdan precios con un grupito. No es lo mismo que recibas insumos subsidiados a tener que comprar los que venden los bachaqueros. No te pueden pedir que vendas al mismo precio.
“Hay vagabundos enriqueciéndose con los cauchos, las baterías y aceite (para automóvil). A todo donde vayamos es la misma cosa. Más que un exhorto se lo imploro en nombre de Chávez, estén en disposición de oír qué es lo que está pasando. En Agropatria hay corrupción. El Gobierno debe hacer un acto de contrición y no creer que todos los demás están equivocados y ellos en lo correcto. He oído hablar al presidente de milagro agrario y se está importando 80 por ciento del azúcar que se consume, 80 por ciento del maíz blanco para arepas y 70 por ciento de arroz. ¿Dónde está el milagro?».
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