Sin Mordaza: Denuncias por violación a libertad de expresión aumentaron 314% en 2019
Sin Mordaza ha identificado cuatro patrones de violaciones al derecho a la libertad de expresión, que además consideran nuevas: detenciones arbitrarias, fallas a portales web informativos, transgresión a la libertad de expresión y medios clásicos de censura
El coordinador legal de Un Mundo Sin Mordaza, Andrés Vilariño, presentó su más reciente informe de sobre las violaciones al derecho a la libertad de expresión en Venezuela. Estos reportes presentan lo ocurrido en lo que va de año y se enfoca en el trimestre julio-septiembre.
«Hasta julio se habían presentado entre 500 y 600 denuncias en materia de libertad de expresión, pero en el trimestre julio-septiembre las cifras crecieron hasta casi las 900 violaciones a este derecho; que se traducen en más de 300 casos o situaciones particulares; es decir, que hay un promedio de entre dos y tres violaciones al derecho a la libertad de expresión por cada persona que denuncia», explicó Vilariño.
En comparación con las cifras del primer semestre del año anterior, «el aumento de denuncias es de cerca de 314%», afirma el representante de esta organización que también promueve los derechos humanos.
Además, Andrés Vilariño detalló que en los primeros nueve meses de 2019 cerraron dos canales de televisión regionales en el estado Zulia, luego de transmitir las alocuciones del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidóm en enero. También, nueve canales por suscripción fueron sacados del aire de forma temporal o de forma permanente, cerraron 11 emisoras a nivel nacional, destacando el caso de Radio Caracas Radio.
Justo a estas violaciones a la libertad de expresión, se encuentra que 15 programas de opinión fueron censurados, 59 trabajadores de la prensa (periodistas, camarógrafos, reporteros gráficos) fueron detenidos y puestos en libertad; sin embargo, unos pocos como los casos de Jesús Medina y Rafael González, trabajador de CNN, continúan presos.
El diario Panorama salió de circulación por la falta de papel, situación por la que han pasado muchos medios impresos del país en los últimos años.
Patrones de violación a la libertad de expresión
En lo que va de año, Sin Mordaza ha identificado cuatro patrones de violaciones al derecho a la libertad de expresión, que además consideran nuevas.
Detenciones arbitrarias: a pesar de que no son nuevas, «son las que han marcado pauta este año. Nunca ha habido un año tan fuerte en detenciones», afirma el coordinador legal de esta organización y señala que los dos casos más embemáticos fueron los de Luis Carlos Díaz y Jorge Ramos.
En el interior del país identificaron un modus operandi contra los trabajadores de la prensa, quienes son detenidos por los organismos policiales del Estado, los obligan a borrar el material grabado, les confiscan los equipos y los liberan bajo amenazas o advertencias. Además, Vilariño dice que la mayoría de emisoras que cerraron este año fuera de Caracas no fue por actos administrativos de Conatel, sino por parte de colectivos u organismos del Estado que se acercan a las emisoras, confiscan los equipos, roban las antenas y, de esta forma, las emisoras no pueden seguir transmitiendo y cierran de forma obligada.
A pesar de no ser una emisora, en el estado Yaracuy se expropió la sede de Diario Yaracuy, que ya estaba fuera de circulación.
Fallas a portales web informativos: en lo que va de 2019 se han dado cerca de 800 bloqueos temporales o permanentes a portales web informativos. «El patrón se da cuando hablan líderes de oposición y se hace para torpedear las transmisiones y luego se vuelve a la normalidad; pero hemos visto que es un patrón reiterado siempre que Juan Guaidó hace algún pronunciamiento, entre otros líderes».
En 2019 se dieron 22 nuevos bloqueos permanentes a páginas como El Pitazo y Caraota Digital; a los que solo se puede acceder por vpn.
Transgresión a la libertad de expresión: son las fallas en las telecomunicaciones por las fallas eléctricas. «Venezuela se vuelve un país zombie, donde las personas no pueden comunicarse con sus familiares y entender que esto también es una forma de libertad de expresión», explica Andrés Vilariño.
Medios clásicos de censura: el cierre de medios de comunicación y la censura a los programas de opinión que es un patrón reiterado este año.