Soñé con Venezuela, por Adalberto Faría Estrada
Soñé que Venezuela contaba con el transporte más moderno del planeta
Amigos lectores: quizás por la situación que está atravesando el país con respecto a la luz eléctrica, he pasado momentos angustiosos en lo que se refiere a dormir bien al igual que muchos de ustedes, soñé que Venezuela contaba con el transporte más moderno del planeta.
Se veían pocos transeúntes en las calles porque la mayoría de los habitantes andaban en bicicletas, motos y automóviles como transporte público y privado, inclusive había rutas suburbanas e interurbanas que poseían transporte aéreo y sistemas de metro en casi todos los estados de mi nación, con un adelanto futurista que no lo tenía ningún país del mundo.
En el aspecto económico poseíamos una abundante producción de alimentos del campo agrícola y pecuario, las empresas manufactureras, textiles, hierro, aluminio, carbón, diamantes, estaban en los niveles más altos y la industria petrolera producía 5.000.000 millones de barriles petróleo diario y el precio del barril rebasaba los 200 dólares. Poseíamos mercados con casi todos los países de los cinco continentes.
Las misiones se habían multiplicado, los sueldos del sector público y de las empresas privadas eran en dólares, teníamos libertad de expresión, libertad de cultos y partidos, no existía el odio y el antagonismo entre el Gobierno y la oposición, se podía protestar cívicamente sin represión, elecciones libres y democráticas, los cargos de Presidente y gobernadores eran por un período de 4 años sin reelección.
Las orquestas infantiles y juveniles estaban esparcidas por toda Venezuela, existía un sinnúmero de empresas áreas y las relaciones diplomáticas marchaban de maravillas con casi todos los pueblos del mundo. Amigos lectores éramos la envidia de las demás naciones porque los venezolanos vivían mejor, en paz, tranquilidad y unión sin distingos en las clases sociales
Los venezolanos tenían un paraíso terrenal, claro no se conocía la miseria y la hambruna que vive inmersa en la mayoría de los pueblos oprimidos, tales como Etiopía, Biafra, el Congo, Sierra Leona, Nicaragua y la mayoría de esos pueblos tribales que son gobernados por dictadores. El otro aspecto que ya no conocíamos era la diáspora con el éxodo masivo de compatriotas que se habían marchado a la mayoría de los países el sur.
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Muchos pensábamos que la nación la tenía que enrumbar por caminos fértiles era el “Señor Creador” y es por eso que este sueño se puede hacer realidad si todos los venezolanos ponemos un granito de arena para formar una inmensa montaña de unión, esa es la idea más perentoria y el deseo de todos, porque otras naciones se han recuperado en el aspecto social, político y económico; ejemplo la China.
A “Dios le pido no despertar de ese sueño tan bonito con mi país y mi gente porque el mundo globalizado está en crisis armamentista, económico, social y político, ya que las grandes potencias tienen la mirada firme de apoderarse de los recursos naturales de los pequeños países entre ellos mi nación, por poseer, mucho petróleo, coltán, hierro, diamantes, oro y agua en abundancia.
De todas maneras estaremos pendientes de estas amenazas o quizás estará equivocado con lo concerniente a estas amenazas, o será que estoy soñando tanto por el hambre que estaba pasando, no quiero criticar a nadie con este pequeño articulo pero es la realidad de lo veo en mis sueños que ya me parece costumbre.
Amigos lectores quedé sorprendido cuando desperté porque iba en una destartalada chirrinchera, (perrera).