Tertulia bajo la mata de guanábana, por Carolina Espada
Los hombres aseguran que cuando un grupo de mujeres se reúne es para hablar de hombres. ¡Cuánto narcisismo y exceso de ignorancia por parte del verdadero sexo débil!
Ayer tarde tuvimos una meriendita muy amena las amigas del #TotalTeam: Omaira, Mariale, Diana y yo (Antonieta no vino). Nada que si el novio de turno, o que si el ex ya va por su tercer matrimonio, o que si lo bueno que está Mark Harmon y que ese es el único Marine que queremos que nos invada. No, el tema de conversación fue el Coronavirus que se ha puesto de moda en las redes.
OMAIRA: Eso es puro bioterrorismo.
YO: ¿Tú crees?
OMAIRA: ¡Ah, pues! Ese es un virus de laboratorio que se les escapó corriendo; igualito que con el del sida, que fue una cosa ahí de unos monos albinos con los que estaban haciendo experimentos en África. ¡Se-les-es-ca-pó! Bioterrorismo puro.
MARIALE: Yo oí que como el Coronavirus le da mayormente a hombres de 45 años –y es bien sabido que en China hay exceso de esa cosmogonía masculina per cápita femenina–, hicieron esa cepa (porque se llama “cepa” la colonia de virus) para diezmar a la población circunferencial de hombres cuarentones.
YO: ¿Tú dices?
DIANA: No tendría nada raro ¡porque se ve cada cosa!… Y en China se ve más, porque hay más gente. Ahora bien, como hija de farmaceutas sé que lo que hay que tomar para prevenirlo es vitamina C ¡pero dosis industriales! Una pastilla de 120 miligramos como si se estuviera en periodo de lactancia, pero cada 45 minutos.
YO: ¿Y no y que el exceso de vitamina C puede dar diarrea, náuseas y cólicos estomacales?
DIANA: No, si tienes Coronavirus, porque una cosa compensa la otra.
YO: Mmm… Ya decía yo.
OMAIRA: ¡Ay, un wasap de Antonieta! ¡Lo leo! “Chicas, ahorita que estuve una semana en Elimperio oí a Trump clarito: que allá pueden estar tranquilos, porque ya está pasando el invierno y el Coronavirus no da ni en primavera ni en verano”.
YO: Ese señor enloqueció. Ni que fuera un catarrito.
DIANA: Si le da Coronavirus habrá que decirle: “Healthy healthy little frog ass. If not healthy, tomorrow will heal”.
OMAIRA: ¿Qué es “little frog ass”?
YO: Culito de rana.
DIANA: Eso es lo que pasa cuando alguien cree que tiene que estar opinando de todo.
OMAIRA: ¡Pero es la opinión de un presidente!
MARIALE: ¡Pero ya va, hay opiniones de opiniones! Dejen que les lea este tuit, que lo guardé porque es lo mejor que se ha escrito: “El Coronavirus es un agente neurotóxico que emite 17Hz causando alteraciones neuronales. Utilizando frecuencia armónica a 17Hz desactiva el CoV; frecuencias ingredientes del remedio: Jengibre 41Hz, Malojillo – 51Hz, Pimienta negra 41Hz, Limón – 91Hz, Miel – 59Hz. La combinación de estos ingredientes crea un campo de fuerza electrostática de 77Hz, la cual anula la frecuencia del ADN del enfermo de 77Hz, restaurando la frecuencia normal del ADN saludable en 75Hz del ser humano. Un ejemplo de la nanotecnología integrada a la medicina ancestral”.
OMAIRA: ¡Buenísimo!
DIANA: No estoy muy de acuerdo con lo del campo de fuerza electrostática.
YO: Yo no entendí nada.
MARIALE: Porque tú nunca pones de tu parte, mija. Pero les digo una cosa: el Coronavirus tiene remedio. Yo coloco en un litro de agua 100 gramos de malojillo y sauco; 5 gramos de jengibre chino -pero del que venden acá no vaya a ser-, eso bien machacado con pimienta negra y conchas de dos limones amarillos picadas en tiritas. Lo hiervo en baño de María durante 15 minutos, lo apago y le agrego 100 mililitros de miel, el jugo de dos limones verdes y un centímetro de agua de azahar. Y hasta dos centímetros, pero sólo para aromatizar. Agito en forma envolvente y tomo media tacita cada dos horas entre las seis de la mañana y las ocho de la noche hasta que me siento mejor. Eso es un tiro.
YO: Tengo como fatiga. No sé.
OMAIRA: Entonces nosotras nos vamos. Hoy comienzo a dar clases de teatro en la universidad.
DIANA: Pero venimos la semana que viene, Carola. No puedo más seguido, porque como urbanista estoy teniendo demasiado trabajo últimamente.
MARIALE: ¡Niñas, mírenme la hora! ¡Yo tengo que pasar un momentico por mi bufete! Mañana voy para tribunales con un caso, que más que caso, es una maraña peluda de doce patas.
Besitos, apurruños, despedidas y mis tres amigas se fueron. La enfermera vino y me dio mi pastillita con mi juguito de guabábana para los nervios. También me aflojó un poquito la camisa de fuerza.