UCV alza la voz ante crisis electoral en el país que deriva en detenciones arbitrarias
La Universidad Central de Venezuela (UCV) reafirmó su disposición a contribuir en la búsqueda de salidas democráticas y exhortó al respeto de las normas legales y los derechos humanos como pilares fundamentales para la reconstrucción de la confianza ciudadana en las instituciones del país
El Consejo Universitario de la Universidad Central de Venezuela (UCV) expresa su profunda preocupación ante la crisis electoral en el país, desatada desde el pasado 29 de julio con las manifestaciones en contra de los resultados electorales oficiales, que dieron como ganador a Nicolás Maduro sin presentar las actas electorales, pero que la oposición asegura que ganó Edmundo González tras verificar más de 85% de las boletas electorales.
Nicolás Maduro se juramentó el pasado 10 de enero y la UCV califica este acto como «un golpe de confianza ciudadana en las instituciones democráticas».
La UCV también denunció la detención de Manuel Muñoz, estudiante de la Escuela de Derecho, quien fue aprehendido el 9 de enero por un cuerpo de seguridad del Estado tras participar en una manifestación pacífica. Hasta la fecha, no se ha logrado confirmar su paradero ni su estado de salud, lo que agrava la preocupación por el aumento de las detenciones selectivas e ilegales en el país.
El comunicado señaló que estas aprehensiones son parte de una «campaña de intimidación» dirigida contra activistas de derechos humanos y ciudadanos que protestan pacíficamente. Entre los casos mencionados están las detenciones del excandidato presidencial Enrique Márquez, el director de la ONG Espacio Público, Carlos Correa, y el profesor universitario Jesús Armas, quien permanece privado de libertad desde hace un mes.
Además, la casa de estudios recordó la detención de la profesora de derechos humanos Rocío San Miguel, quien lleva 11 meses en prisión, mientras expone que el profesor Juan Barreto, de la Escuela de Comunicación Social, enfrenta un confinamiento domiciliario forzoso debido a la presencia intimidatoria de funcionarios policiales en los alrededores de su vivienda.
La universidad también expuso los casos de los bachilleres Anthony Granadillo y Armando Solís, de las facultades de Arquitectura e Historia, respectivamente, quienes continúan recluidos en el Centro Penitenciario de Tocorón, en el estado Aragua, desde los días posteriores a la elección del 28 de julio.
La UCV ha intentado gestionar la liberación de estos estudiantes, pero no ha tenido éxito, lo que evidencia el estado crítico de los derechos fundamentales en el país.
En su declaración, la UCV exigió la liberación inmediata de todas las personas detenidas arbitrariamente, conforme a las garantías constitucionales y legales vigentes. Además, reiteró su compromiso con la defensa de la democracia y la búsqueda de soluciones pacíficas que promuevan el diálogo y el respeto entre los ciudadanos.
«La paz es una aspiración fundamental de la sociedad venezolana, y solo puede lograrse reconstruyendo la convivencia respetuosa y el diálogo entre todos los compatriotas», subrayó el comunicado.
La Universidad Central de Venezuela reafirmó su disposición a contribuir en la búsqueda de salidas democráticas y exhortó al respeto de las normas legales y los derechos humanos como pilares fundamentales para la reconstrucción de la confianza ciudadana en las instituciones del país.
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