Una “inofensiva” venta en redes te puede costar la vida
Autoridades recomiendan que las personas estén alerta y no confíen en este tipo de ofertas
Durante los últimos tres meses en el estado Yaracuy se registró un asesinato y tres enfrentamientos relacionados con ventas a través de redes sociales. En estos casos cinco personas resultaron fallecidas, la mayoría eran antisociales.
La promoción de mercancía por páginas de comercio de Facebook atrae a compradores, sobre todo de otros estados, quienes se interesan por los bajos precios en los que ofertan algunos productos e, incluso, establecen una comunicación con el vendedor sin saber realmente si lo son, y cuando viajan para concretar la compra se convierten en víctimas de robo o estafa.
Esta modalidad que aplica mucho el mundo hamponil en otros estados, sobre todo Caracas, Zulia, Lara y Aragua, también comenzó a ser usa da este año en nuestro estado, lo cual ha dejado una cifra significativa de muertos en pocos meses.
Es por ello que las autoridades recomiendan a las personas que no confíen en las ofertas que personas puedan hacer por esta vía y las que se dedican a vender mercancía que no la publiquen de esa forma, pues en ambos casos pueden ser víctimas.
Un dato curioso y muy particular, para que las personas estén alertas, es que quienes se hacen pasar por vendedores citan a las personas en zonas muy solitarias, en otros estados e, incluso, se muestran muy interesados por saber cómo va el viaje, son insistentes en este tema.
Según las autoridades, las bandas dedicadas a este tipo de delitos operan entre los municipios Urachiche, José Antonio Páez, Peña y Cocorote.
Recuento de los casos
El primer caso fatal se dio cuando un comerciante viajó desde Valencia con destino al sector Belisa, municipio Urachiche, para comprar un carro. Sucedió el 1 de octubre.
Adolfo Castro, de 49 años, llegó a la zona a las 6:00 de la tarde, pero notó que se trataba de una trampa porque antes de bajarse de la camioneta pick up que conducía, se dio cuenta de la actitud sospechosa de los sujetos.
El hombre de una vez arrancó la camioneta con la intención de escapar, pero los hampones estaban armados y comenzaron a dispararle, lo hirieron, eso produjo que perdiera el control del carro, cho-
cara con un árbol y muriera. El amigo de 48 años que lo acompañaba resultó herido, aunque no de gravedad.
El propósito de los sujetos era quitarle la camioneta y los dólares que Castro cargaba para la supuesta compra de otro vehículo.
Contó el amigo de la víctima que en reiteradas oportunidades los sujetos le hicieron llamadas para explicarle dónde se encontrarían.
Días después tres de los implicados fueron detenidos por funcionarios de la División de Homicidios del Cicpc. Para el 29 de noviembre la historia ya no se trata de la muerte de una víctima sino de un victimario, quien respondía al nombre de Aner Palencia (22), residente en Urachiche, quien pretendía estafar a un comprador que viajaba desde otro estado, pero una comisión mixta del Cicpc lo impidió y el sujeto murió al enfrentar a los funcionarios.
Un caso similar surgió en Albarico, municipio San Felipe. Sujetos ofertaron por las redes sociales la venta de una camioneta Super Duty, el comprador les dijo que a cambio les entregaría un carro Corolla y cinco mil dólares.
Resulta que cuando la víctima llegó desde Caracas buscó el apoyo de unos policías que lo resguardaran, cuando llegaron al sitio tres hombres esperaban a la entrada del sector Las Acacias y al ver la presencia policial comenzaron a disparar y en el enfrentamiento Jessen Rangel (22) cayó abatido.
Por último se cuenta el caso de dos hermanos, Armando Lugo (19) y Alexánder Lugo (24), quienes se mostraron interesados en la venta de un teléfono inteligente que colocó un hombre por la red social Facebook.
El vendedor les dijo que fueran hasta su casa, ubicada en el centro de San Felipe, para buscar el celular. Efectivamente los sujetos hicieron lo que el muchacho le dijo, pero cuando les abrió la puerta principal de la casa, los supuestos compradores lo encañonaron, en el interior de la casa lo maniataron y amordazaron junto a su familia para cometer un robo.
Justo cuando los hampones comenzaban a empacar las cosas de valor, llegó una comisión de la Policía regional y en un enfrentamiento los ultimó a ambos.
Especial: Yaracuy al Día