Así Uruguay logró conseguir sus primeros tres puntos en el Mundial Rusia 2018 en un partido que costó pero que ganó jugando a lo que sabe, a lo que la historia lo ha marcado y por la cual se le conoce, a la "uruguaya", con un gol sobre la hora
La selección uruguaya debutó en Rusia 2018 con un agónico triunfo por 1 a 0 sobre una selección egipcia, en Ekaterimburgo que no pudo contar con su máxima estrella, Mohamed Salah. El único gol del partido fue obra de José María Giménez, tras conectar de cabeza un tiro de esquina, en medio de tres defensores.
El partido fue de ida y vuelta, en el primer tiempo la garra charrúa intentaba imponerse en el juego aéreo y ganar las segundas pelotas, mientras que Egipto proponía crear peligro elaborando juego desde su arco. Luis Suárez desperdició claras ocasiones de gol que hubiesen puesto a Uruguay en ventaja en la primera mitad ante una luchadora Egipto que se imponía físicamente en defensa.
Ya en el segundo tiempo, Uruguay saldría más decidido dominando las acciones del juego. El mediocampo charrúa comenzó a tocar más el balón y propuso juego por las bandas, Cavani tomó protagonismo y estuvo a punto de marcar en dos ocasiones, pero la figura del portero Elshenawy atajó cada disparo "charrúa" hasta que en el minuto 89', Giménez se impuso en el juego aéreo y marcó el agónico gol de la victoria uruguaya. Tras un centro desde la esquina derecha, el defensa se elevó y conectó un testarazo que dejó sin reacción al portero egipcio, ese fue su primer gol en una Copa Mundial y su sexta anotación con la selección uruguaya.
Así Uruguay logró conseguir sus primeros tres puntos en el Mundial Rusia 2018 en un partido que costó pero que ganó jugando a lo que sabe, a lo que la historia lo ha marcado y por la cual se le conoce, a la "uruguaya".
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