«Ver una llamada nos hace temer por su vida»: familia de Mayra Castro pide su libertad
Mayra Castro, dirigente de Primero Justicia en el municipio Urdaneta (estado Miranda), ha sido trasladada en tres ocasiones a un hospital debido a problemas de tensión y fuertes dolores en la región cervical durante la última semana. Su familia denuncia que las condiciones de reclusión han agravado sus problemas de salud
Cada día que pasa, la salud de Mayra Castro se deteriora. La dirigente de Primero Justicia en el municipio Urdaneta (Cúa, estado Miranda) ha sido trasladada tres veces en la última semana a un centro asistencial debido a problemas de tensión no controlados y fuertes dolores en la región cervical.
«Queremos su libertad plena, ella es inocente de todo lo que se le acusa. Necesitamos su libertad porque cada día su salud se deteriora. Verla lo demacrada que está, su situación de estrés y depresión es impresionante. Ver una llamada o un mensaje de esa institución (Policía) nos hace temer por su vida«, dice su prima Yamaica Castro.
Mayra Castro, de 47 años, fue detenida cerca de su vivienda –ubicada en el sector La Fila de Cúa– el pasado 2 de agosto por funcionarios de la Policía Municipal de Urdaneta, luego de visitar a sus dos hijos más pequeños.
La detuvieron con un listado de militantes de Primero Justicia y dos modelos de actas electorales, que utilizó para la formación de testigos electorales que participaron en la elección del 28 de julio. El Ministerio Público la acusa de terrorismo, instigación al odio y ultraje a funcionario, pese a que no opuso resistencia cuando fue arrestada.
Desde entonces se encuentra detenida en el comando municipal de Nueva Cúa. El pasado lunes 17 de febrero fue trasladada en la noche al hospital Dr. Osío por dolor cervical y problemas de tensión. Cuatro horas después estaba de vuelta en su celda. El miércoles 19 y el viernes 21 se repitió la situación.
«Lo que menos deseo en la vida es verla morir o que me dijeran que a la persona que le debo la vida falleció en prisión», dijo su hijo Editson Quintero en un video difundido el fin de semana.
A Yamaica le recomendaron llevarla a un especialista para controlar su tensión. Sin una valoración de un cardiólogo, tampoco se le puede dar medicamentos por largos periodos de tiempo. Una de las doctoras le comentó que esos episodios podrían derivar en un infarto.
Pero esos no son sus únicos problemas de salud. «Está reteniendo líquido en las extremidades inferiores, ella sufre de migrañas y a veces en las noches las compañeras no duermen, hablan mucho y le dan episodios de migraña. Todo eso ha contribuido a que se deteriore su salud».
Mayra comparte celda con otras cuatro mujeres, pero en el lugar apenas caben dos colchonetas y queda un espacio ínfimo para caminar hacia el retrete. A la hora de dormir, les toca turnarse las colchonetas o sencillamente dormir sentadas.
A la familia Castro le toca movilizarse tres veces al día para llevarle sus comidas, los enseres que necesite y el agua que requiere para tomar o bañarse. La visitan los viernes, solo por una hora.
«Ella tiene sus altas y sus bajas, se mantiene aferrada a Dios y es lo que la ha ayudado, pero por el paso del tiempo y no obtener una respuesta se deprime. Creemos que cuando tiene esos bajones anímicos pues presenta problemas de tensión», comenta la prima de Mayra.
Por su situación de salud, se le hizo una valoración médica el mes de noviembre pero no hubo respuesta de tribunales. El 18 de diciembre le hicieron otra y los resultados fueron entregados los primeros días de enero. Pero por problemas de traslado de los funcionarios a Caracas, los informes se entregaron el pasado 18 de febrero.
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«Se quedó en que el defensor público iba a hacer una solicitud de cautelar, pero el juez no ha revisado el expediente. No tenemos nada concreto. A ella deberían haberle dado fecha de apertura de juicio, pero no hay información sobre eso», explica Yamaica Castro.
Además, asegura que no hay ningún tipo de pruebas que la incriminen con algún delito. «No hay videos, mensajes o fotos porque ella no se encontraba en ninguna de esas protestas». También cuestiona la falta de avance en su caso, pues a dos hombres vinculados a su causa se les otorgó medidas cautelares y fueron excarcelados.
Compañeros del partido se suman al llamado para la libertad de la dirigente política: «Queremos que le den una medida por su salud. Mayra no hizo nada malo, Mayra simplemente defendió su país, pensar distinto no es un delito pero por eso la retuvieron».
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