Xenofobia contra venezolanos pica y se extiende a ciudad fronteriza de Brasil, Pacaraima

El padre Jesús de Bobadilla, uno de los que ofrece ayuda humanitaria a venezolanos que llegan a Pacaraima, explicó que la tensión en la frontera ha aumentado en los últimos días por los constantes enfrentamientos que se han dado.
«Hay una xenofobía incubada en los ciudadanos de Pacaraima, ya explotó, las cosas mejoraron, pero continúa», contó el padre español, quien todas las mañanas alimenta a los quien todos los días ofrece desayunos a cientos de venezolanos después de cruzar la frontera.
Los vecinos de la zona exigieron al gobierno federal que tomara las medidas necesarias para frenar la violencia en la región. Marcharon a lo largo de una carretera que une a Pacaraima con Boa Vista, la capital del estado Roraima, y como consecuencia algunos comercios tuvieron que bajar la santamaría para no correr riesgos.
Las manifestaciones comenzaron la noche del viernes, después de que se presentara la denuncia de una violación a una estudiante indígena de 15 años. Según el diario brasileño Folha, de Boa Vista, el presunto culpable es un venezolano.
«La población está harta de todo lo que sucede en las calles, la violencia, los robos, la suciedad… Es normal pero no justifica los brotes de violencia», precisó el padre.
En 2018, residentes de la localidad de Pacaraima atacaron campamentos de venezolanos que estaban en el lugar e incendiaron todas sus pertenencias. Luego de esto, cerca de 1.200 de ellos decidieron regresar a su nación de origen. Ante esto, el gobierno brasileño abrió los ojos y decidió reforzar las medidas humanitarias que ya venía poniendo en marcha desde tiempo atrás, con la Operación Acogida; iniciativa que apoya a los venezolanos que huyen a Brasil para no pasar la crisis económica de su país.