“Yo jamás les fallaré a ustedes”, por Beltrán Vallejo
Así Nicolás Maduro terminó su alocución para despedir el año 2018 y para recibir presidencialmente el año 2019. Sin duda, estas palabras quedarán para la historia por su alto contenido sardónico.
En ese mensaje Maduro hizo un rufianesco balance de su gobierno, donde más bien evidenció que viene fallando desde hace rato; y por lo que se ve, no tiene propósito de enmienda. Caramba, 6 años fallando y pretende más.
¿Cómo es posible que en esa alocución el Carnet de la patria fuera presentado como “la solución de los desafíos económicos”? Aquí es donde más nos falla Maduro, en mentirnos cínicamente. La recuperación integral del país no pasa por este carnet; no pasa por colocar a 16 millones de venezolanos bajo el efecto de algoritmos y recibiendo a través de ellos uno que otro dinero, que sólo servirá para el clientelismo y el populismo gubernamental; no es este escenario del big data a lo chino desde donde el país se recuperará.
Tiene tiempo fallando este señor Nicolás, y una de sus principales fallas es estafarnos con cosas como el “petro”, un ente híbrido que un día es una criptomoneda, otro día es una unidad de cuenta, otro día es deuda, y otro día es “la madre de Tarzán”, y que Maduro lo expone en su balance del 2018 como el “instrumento para repotenciar los motores de la producción y dejar atrás el rentismo petrolero”. Este discurso de Nicolás es un discurso para imbéciles, definitivamente.
Claro que nos falló; nos falló en el hecho de que producto de sus errores, de su mafia y de su trogloditismo económico, Venezuela cayó en una de las hiperinflaciones más devastadoras entre los registros históricos de las economías occidentales
Claro que nos falló; en sus manos se cayó la producción petrolera a niveles históricos, y no le quedó otra que echarle la culpa a mafias que Chávez y él mismo alimentaron, abonaron, los dejaron ser. ¿Quién nombró a Eulogio del Pino Ministro de Petróleos y Presidente de PDVSA? ¿Quién colocó al difunto Nelson Martínez en la dirección de la estatal petrolera? Fue usted, Señor Maduro. Y como muestra de que es reincidente en la desgracia, instaló al entramado militar en la dirección de la industria para que termine de despedazar lo único que medio produce algo en este país.
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Yo sé que el principal culpable de esta tragedia es Chávez, pero estas cifras matan a Maduro: En el 2012, la producción de Petróleos de Venezuela fue de 2,47 millones de barriles diarios, y al día de hoy la producción de petróleos cayó a 1,23 millones de barriles diarios; y pensar que llegamos a producir 3,5 millones de barriles por día.
Claro que nos falló; nos falló en la democracia; nos falló en la concordia; nos falló en la civilidad cuando no hay en Venezuela instituciones políticas, sino malandraje, como el de la ANC, como el de un TSJ de pelafustanes, como el de una fiscalía involucrada en purgas entre pandillas de su propio gobierno, y nos falló con unas fuerzas armadas corrompidas hasta los tuétanos. Pero el principal pecado está en esos 4 millones de venezolanos que se han ido de su país buscando calidad de vida en otras tierras.
Y lo más lamentable, es que no tiene propósito de enmienda, no hay arrepentimiento
Quien no debiera fallar es el pueblo venezolano, los que estamos aquí y los que estamos más allá de la frontera, para que juntos logremos que no se nos acabe la patria en sus manos.