Rafael Ramírez denuncia contrato de Pdvsa con la desconocida Erepla Services
El general Manuel Quevedo firmó acuerdos con Erepla Services LLC., empresa norteamericana constituida en 2018, para operar los campos Rosa Mediano y Tía Juana, que eran operados directamente por Pdvsa
El ex ministro Rafael Ramírez denunció la entrega de operaciones de campos petroleros de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) a empresas desconocidas por parte de la actual gerencia de la industria, al alegar que es la «peor entrega petróleo» en la historia del país.
De acuerdo a informaciones dadas por Erepla Services LLC., empresa de energía internacional con sede en Estados Unidos, firmó con Pdvsa acuerdos para revitalizar los campos Rosa Mediano y Tia Juana. La agencia de noticias Argus indicó que los contratos suscritos son «inusualmente favorables a Erepla» y entre otras cosas destaca que la compañía norteamericana no está obligada a levantar capital.
«Pdvsa tradicionalmente había insistido en controlar el mercadeo de todo el crudo producido por sus asociaciones estratégicas», recordó Argus. Sin embargo, Erepla comercializará la producción de petróleo por 25 años con una extensión automática de 15 años más
A juicio de Ramírez esta nueva empresa, creada únicamente para este “negocio”, registrada en Delaware, EEUU, es de capital nigeriano y norteamericano, donde entre sus socios está Sargeant Marine, empresa transnacional que tenía el monopolio del manejo del asfalto con la vieja Pdvsa.
«Ahora nos sorprendemos con otra noticia más, la de una agencia de prensa internacional que publica la nota de prensa de una nueva empresa: Erepla Services, nueva socia de Pdvsa, empresa desconocida a la que Quevedo le ha entregado, de forma privada, nada más y nada menos que por 25 años, renovables por 15 años más, los campos Rosa Mediano y Tía Juana, que eran operados directamente por Pdvsa», escribió en un articulo publicado por el ex presidente de la petrolera estatal.
El acuerdo otorga a Erepla Service «la administración diaria de la producción, comercialización y explotación del petróleo producido bajo este acuerdo».
«Según el despacho de prensa, Erepla Service no sólo se atreve a calificar los contratos petroleros del período Chavista, léase de nuestra Plena Soberanía Petrolera, como un modelo ‘corrupto’ (lo cual no hace sino repetir el discurso de Maduro), sino que indica que la sociedad cumple con las leyes norteamericanas y solicitará la autorización a las agencias de ese país para su contrato (obsérvese que no solicita la autorización de ninguna autoridad del Estado venezolano)», destaca Ramírez.
Por otra parte, estos contratos están hechos “de acuerdo a los estándares de los contratos norteamericanos de petróleo” e indican que las regalías del 33,33% serán canceladas por Pdvsa y que sus operaciones están exentas de cumplir con las leyes laborales y de contenido nacional venezolano. «Es decir, que ni siquiera pagarán las regalías, que es lo mínimo que se les exige en su propio país».
Otro contrato suscrito por Quevedo con otra empresa del mismo grupo, llamada Erepla Trading, garantiza que ellos comercializarán la producción de petróleo (en clara violación de la Ley Orgánica de Hidrocarburos que establece que solo Pdvsa puede vender petróleo venezolano), y que, además, garantizan el manejo de los ingresos de esa venta de “manera transparente”, sin injerencias del Estado venezolano, cumpliendo con los términos de las sanciones impuestas al país.
«La nefasta apertura petrolera quedó en pañales, ésta es la peor entrega en la historia petrolera de nuestro país, Maduro y Quevedo tendrán que rendir cuentas por entregar activos de todos los venezolanos y ceder nuestra soberanía sobre el manejo de nuestro petróleo, en violación de nuestra Ley Orgánica de Hidrocarburos y de la Constitución en sus artículos 302 y 303. ¿Qué dirá ahora la ANC, tan sensible a lo que se denuncie de Quevedo?», se pregunta Ramírez
Esta no es la primera vez que Pdvsa suscribe acuerdos con empresas desconocidas o con poca experiencia en el área petrolera. En el año 2017, la estatal entregó un contrato ambicioso a Southern Procurement Services Ltd para que junto, a la también (en ese entonces) recién creada empresa militar Camimpeg, reactivara 1.500 pozos de crudo.
Pero en septiembre de 2018, insistió en esta practica al firmar memorandos de entendimiento con siete empresas de servicio para operar campos petroleros y activar pozos inactivos, todas ellas desconocidas en el sector.
Analistas destacan que esta estrategia de Pdvsa obedece a la disminución de operaciones (debido a la deuda que por 2.000 millones de dólares de Pdvsa a las principales compañías de servicio en el mundo) Schulemberger y Halliburton.