60% de mujeres explotadas sexualmente en La Parada y Cúcuta son venezolanas
Muchas jóvenes de Ureña están siendo utilizadas para explotación sexual y trata de personas. Las organizaciones cada día reciben denuncias de mujeres que acuden desde los municipios fronterizos del Táchira por violencia de género y llegan en busca de ayuda psicológica
La ONG Operación Libertad Internacional contabilizó que al menos 60% de las mujeres que son explotadas sexualmente en las poblaciones de La Parada y Cúcuta, pertenecientes a Villa del Rosario, son de nacionalidad venezolana.
“Hay muchas mujeres venezolanas y niñas en la explotación sexual, y lo peor es que hay muchos padres y esposos que están poniendo a prostituirlas”, señaló Natasha Duque, representante de la ONG.
Una red delictiva lleva a niñas y adolescentes con edades comprendidas de 12 a 17 años, del oriente y centro de Venezuela y las pasan a Colombia a través de los pasos ilegales, conocidos como trochas. Son «marcadas» con un tatuaje en su cuerpo o rapándoles una parte de su cabello, para identificar a cuál organización pertenecen.
“Pese a que los puentes internacionales están abiertos, a los alrededores están ocurriendo delitos porque no hay un interés por parte de los gobiernos de ambos países”, apuntó la activista.
Dos jóvenes del Táchira que entre enero y febrero se trasladaban desde esa entidad hasta La Parada, se encuentran desaparecidas, según detalla La Opinión de Colombia.
Otro hecho que ocurrió en una trocha de Centeno, del lado venezolano, entre La Parada y San Antonio del Táchira (municipio Bolívar), fue la violación y apredeamiento de una activista de los derechos de la mujer, quien fue abordada por al menos cinco hombres al acudir a esa zona para atender un supuesto caso de violencia de género.
Natasha Duque alertó que muchas jóvenes de Ureña están siendo utilizadas para explotación sexual y trata de personas. Las organizaciones cada día reciben denuncias de mujeres que acuden desde los municipios fronterizos del Táchira por violencia de género y llegan en busca de ayuda psicológica.
Otra cuestión es el aumento de migrantes venezolanos por la selva del Darién, un peligroso trozo de selva que conecta a Colombia con Panamá. Esta ruta es usada para seguir en la vía hacia el norte, como último destino Estados Unidos.
Durante los primeros meses de 2022, diversas agencias de Naciones Unidas y Migración Panamá ubicaron por primera vez a los venezolanos a la cabeza de los que transitan este paso, por encima de haitianos y otras nacionalidades. En este paso, los migrantes, especialmente las mujeres, también son víctimas de violencia sexual y violaciones masivas por parte de grupos armados que controlan la zona.
Por ello, defensoras de los derechos humanos solicitan el reforzamiento de la seguridad en los pasos informales y en la zona de La Parada, en vista de que muchos de estos hechos violentos se ven normalizados por la sociedad, lo que aumenta el silencio de las víctimas.
Con información de La Nación