Alcalde de Baruta: Proyecto de pádel en La Alameda es en propiedad privada
El alcalde de Baruta Darwin González se pronunció sobre el conflicto que ha generado el proyecto de canchas de pádel en La Alameda y respondió al video viralizado donde le señalan de haber insultado a una líder vecinal
El alcalde de Baruta, Darwin González, emitió una declaración a través de sus redes sociales sobre el pleito vecinal que se ha desatado a raíz de un proyecto de construcción de un club deportivo con seis canchas de pádel en la urbanización La Alameda de esa jurisdicción.
En el audiovisual, recordó que el 16 de enero de 1979 la Direccion General de Desarrollo Urbano del entonces Distrito Sucre -que derivó en los municipios Baruta y El Hatillo a partir de 1987- «otorgó el permiso general de construcción para el parcelamiento urbanización La Alameda».
Refirió que el oficio datado hace más de 40 años dejó establecida la estructura parcelaria de la zona, con 34 parcelas a las cuales se les asignó número de catastro, número cívico, superficie de metros cuadrados y uso quedando de la siguiente manera: «cuatro conjuntos unifamiliares, 25 multifamiliares, cuatro multifamiliares con comercio local y un club deportivo».
Es allí en esa parcela D de la calle B de La Alameda donde se impulsa un proyecto de construcción por parte de la misma Urbanizadora Colinas de Valle Arriba.
«El 22 de julio se realizó una asamblea ciudadana a la cual asistí e hice varias recomendaciones. Una de ellas se ha descontextualizado. Quiero dejar claro que en ningún momento he pretendido ofender a ninguna persona con mis palabras».
Así respondió el alcalde a la viralización de un audiovisual de aquel día donde habló de «abogados recién graduados» que la comunidad, tanto como Fabiana Garantón -una abogada de 29 años cursando estudios superiores-, recibió como un insulto hacia quien ha asumido el liderazgo del reclamo vecinal.
Comunicado oficial. Baruteños les pido que escuchen el vídeo completo y me dejen sus comentarios. pic.twitter.com/W2eoM46UU1
— Darwin González (@darwingonzalezp) August 7, 2023
Las canchas de Padel en Baruta generan el rechazo vecinal,mientras su alcalde visiblemente irritado, intenta descalificar a @FGaranton por su ¿juventud?
Menospreciar un legítimo reclamo solo aisla a los vecinos de sus autoridades.Urge que vuelva el diálogo transparente y honesto pic.twitter.com/ZP9jYI8jhh
— Enver Conde Ferrer (@EnverConde) August 6, 2023
«Mi recomendación fue que dada la complejidad del caso, donde están involucrados derechos fundamentales de ambiente, convivencia ciudadana y propiedad privada, propuse buscar los mejores abogados con experiencia y experticia en el tema para trazar una estrategia que nos lleve a coseguir un equilibrio y la resolucion del tema», quiso aclarar Darwin González.
Mencionó la reunión técnica y exploratoria realizada en la sede de la Alcaldía de Baruta el 27 de julio, con los vecinos, y el acuerdo de crear una comisión con ellos para estudiar el caso. «El jueves 4 de agosto asistieron a las Direcciones de Catastro e Ingeniería Municipal para constatar la documentacion legal de la propiedad así como su zonificación y uso», informó el funcionario.
González cerró la grabación afirmando que «mi compromiso como alcalde es garantizar el derecho de todos los vecinos y estamos comprometidos en buscar soluciones consensuadas, legales y factibles sobre este tema».
Lo que reclaman los vecinos de La Alameda
Los habitantes de La Alameda han denunciado una profunda opacidad en este caso, con la alcaldía ocultando el estudio de impacto ambiental del proyecto. Ese documento, apuntan, no fue realizado toman en cuenta el impacto sociocultural y muestra en su contenido inconsistencias y frases sin sentido (como la parte donde habla de un tendido en una zona aislada con una población poco instruida que ni los impulsores del proyecto entienden).
También han señalado dudas sobre la propiedad del terreno, que califican como bosque urbano. Sostienen que hay peligros geológicos y estructurales, y alertan sobre impactos negativos en la vegetación y la fauna del lugar.
Además, cuestionan la instalación de un club privado dentro de una zona residencial y temen que el ruido se apodere del lugar donde, además, pudiera complicarse el tráfico y la tranquilidad de los residentes. Tales señalamientos son respondidos por los promotores de la empresa en este reportaje de TalCual.
Los vecinos se han organizado e intentado acciones ante distintas instituciones como la Alcaldía, el Concejo Municipal, el Consejo Legislativo de Miranda, la Fiscalía y el Ministerio de Ecosocialismo.
Lo que ha dicho el alcalde sobre La Alameda
El sábado 22 de julio el alcalde Darwin González asistió a una asamblea vecinal en La Alameda y allí entregó una gruesa carpeta de papeles con el expediente «de acceso público» del caso, a la que TalCual tuvo acceso.
Allí se incluyeron documentos de catastro, de registro de la empresa, de inicio de obras, distintas solicitudes, un estudio de impacto ambiental que tardó nueve meses en ser visto por los vecinos –y nadie sabe bien por qué– así como una sentencia de un tribunal que otorgaba un sobreseimiento a una causa iniciada ante el Ministerio Público por parte del abogado Juan Garantón, vecino del lugar.
Ante los vecinos el alcalde dijo que el proyecto cumple con todos los requisitos legales en materia de papeles, y convocó a los vecinos a designar una comisión con especialistas para estudiar el caso con funcionarios de su despacho (la reunión se concretó el jueves 27 de julio).
Lo que han dicho los promotores del pádel
En entrevista exclusiva con TalCual, Rodrigo Henríquez y Carlos Arcay, promotores del proyecto y representantes de la Urbanizadora Colinas de Valle Arriba C.A. que impulsa la construcción, han ratificado que el terreno es privado y está en manos de la misma empresa que construyó toda la urbanización hace cuatro décadas.
«El terreno cumple con todas las características para desarrollar un proyecto deportivo que incluye además otros servicios porque es un club deportivo. Lo principal va a ser el pádel, pero puede tener servicio de fisioterapia, clases de yoga, un cafetín», decía Rodrigo Henríquez. «La idea es desarrollarlo para tener un negocio allí y brindar servicios», apuntaba Arcay.
También denunciaban que vecinos están llamando a «irrespetar la propiedad privada» y que comenzarán la obra porque «se nos agota la paciencia».