Aumento de protestas en 2019 contradice la paz que Maduro pregona
Los venezolanos protestaron por los cuatro costados del país, en zonas rurales y urbanas, muchas fueron espontáneas, realizadas por vecinos y vinculadas principalmente a exigencias de: servicios básicos, alimentos y cambios políticos
Pese a la cacareada paz del país que ha pregonado Nicolás Maduro durante todo este 2019, las protestas contra el régimen ya sumaban 14.330 en octubre. Hasta ese mes ya habían superado a todas las ocurridas en el 2018, según el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS), institución que lleva un conteo de manifestaciones en el territorio nacional.
El 9 de noviembre, desde su cuenta en Twitter, el líder del régimen venezolano anunciaba que este año cerraba “victorioso y en paz”. Una fotografía muy distinta de la que expone la citada ONG en su informe mensual de conflictividad, publicado en su página web.
Ya los primeros seis meses de este año comparados con el mismo periodo de 2018, hubo un incremento de 97% de las protestas y de 112% en relación con 2017.
Entre enero y julio de 2019, el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social documentó 10.477 protestas durante el primer semestre de 2019, equivalente a un promedio de 58 diarias.
Los venezolanos protestaron por los cuatro costados del país, en zonas rurales y urbanas, muchas fueron espontáneas, realizadas por vecinos y vinculadas principalmente a exigencias de: servicios básicos, alimentos y cambios políticos, otras planificadas y organizadas por simpatizantes de partidos políticos y grupos sindicales, refiere el informe de la ONG.
Y aunque dirigentes del oficialismo como el gobernador del estado Miranda, Héctor Rodríguez, y otros insisten en dibujar un país en paz, la entidad que él dirige fue la que más protestas registró durante los primeros seis meses del año.
“Estamos cerrando con mucha más paz que cuando iniciamos el año, con muchos problemas, pero con un mensaje muy claro de la necesidad de unirnos para avanzar y superar las dificultades”, destacó el martes 17 de diciembre Rodríguez, en su programa En la Palestra, transmitido por Radio Nacional de Venezuela.
Incluso, en el mes de octubre, el último sobre el que el observatorio de conflictividad ofreció reporte de protestas, el estado Miranda se ubicó en el cuarto lugar. Un indicador que por lo visto el gobernador mirandino desconoce, en un país en el que solo un gran descontento social justifica que funcionarios de la Guardia y la Policía Nacional recorran de forma permanente calles y autopistas con indumentaria antimotines.
Rodríguez imita, obviamente, el proceder de Maduro, quien habló de la paz que trajo su constituyente al país, aun cuando las manifestaciones han tocado las puertas del Palacio de Miraflores, tal como ocurrió con aquella manifestación del 31 de marzo de este año cuando vecinos de Catia reclamaron en la avenida Sucre, a unas cuadras de ese despacho, por falta de agua.
Ante tales hechos “la respuesta del régimen a las manifestaciones populares y pacíficas en todo el país ha sido la criminalización, judicialización y la implementación de la represión letal como política de Estado. Ha sido ejecutada principalmente por grupos de exterminio conformados por funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), colectivos paramilitares, Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y otros cuerpos policiales.
Adicionalmente, se destaca la participación de integrantes de las Redes de Acción y Articulación Sociopolítica (Raas) en las comunidades, las cuales están conformadas por vecinos que tienen un rol de agentes de inteligencia, informando a cuerpos de seguridad y colectivos paramilitares sobre la ubicación e identidad de manifestantes y de personas críticas o disidentes”, destaca el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.
Asimismo, el informe del primer semestre refiere que el OVCS y el Programa Venezolano de Educación Acción en Derechos Humanos (Provea) lograron documentar de manera conjunta la muerte de 61 personas durante el desarrollo de las manifestaciones ciudadanas, así como el asesinato de seis personas, días después de realizadas las protestas, que fueron detenidas en sus casas y ejecutadas extrajudicialmente por participar en protestas u organizarlas. Las muertes ocurrieron en 17 estados del país.
Estas organizaciones refutan la supuesta paz que el régimen de Nicolás Maduro intenta venderle al país.