Bájate de esa nube, por Teodoro Petkoff
A Chávez ya se le pasó el susto. Ha vuelto a ser el mismo de antes. Ha reaparecido toda la vieja arrogancia, prepotencia y boconería. Igualito que los adecos y los copeyanos después del 4F, quienes una vez pasado el susto se olvidaron hasta de la Reforma Constitucional, Chávez ahora canta «Sigo siendo el rey». Igualito que CAP, cuyos adulantes hacían que en las plazas de toros la banda musical le tocara la vieja ranchera.
Volvió a vestir el uniforme que había prometido no portar nunca más. Este hombre no respeta ni su propia palabra. A sabiendas de que tuvo que renunciar a él por presión de sus propios amigos militares, que creyeron haberlo convencido del enorme motivo de irritación que constituía para la oficialidad el uso del uniforme por parte de un oficial retirado, Hugo vuelve a burlarse de la FAN. Pero, es que ya se le quitó el susto y cree que puede volver a las andadas.
Volvió con el ritornello del 2021. Sabe que eso no es posible. Sabe perfectamente bien que, en el mejor de los casos para él, que sería el de terminar su actual periodo, sólo podría llegar hasta el 2013 si ganase las elecciones del 2006. Sabe perfectamente bien que cada vez que menciona el 2021 como término de su mandato provoca al país porque está anunciando su intención de dar un golpe de Estado, puesto que no habría otra manera de llegar al 2021. Pero, es que ya se le quitó el susto y cree que puede volver a las andadas.
Repite una y mil veces que no será posible enjuiciarlo por lo del FIEM. Dice que no se robó nada, como si esa fuera la acusación y no la de malversación. Este delito implica el desconocimiento del Parlamento; por eso es tan grave. Y ese delito lo confesó. Pero ahora, dándose cuenta de esa metida de pata, inventa que hubo una transferencia de partidas. Nueva mentira porque las transferencias de partidas sólo se pueden hacer previa autorización del Parlamento y esto no ha tenido lugar. Está prensado y lo sabe. Por eso se vuelve jaquetón y amenazante. Por eso García Carneiro amenaza al TSJ e Iris Varela anuncia que «el pueblo» tomará el tribunal si se le ocurre abrir juicio al presidente. Pero, es que ya se le quitó el susto y cree que puede volver a las andadas.
Chávez no termina de darse cuenta de que una de las causas principales de todas las tribulaciones del país es su discurso. Que a punta de un discurso agresivo, intolerante y prepotente ha creado hasta una contrarrevolución sin haber hecho ninguna revolución. Ha polarizado al país tan sólo con su incontenible cháchara, sin que haya ninguna obra significativa que la justifique. La palabra enmascara la ausencia de toda obra verdadera. Cubre con palabras un gigantesco vacío. Sin embargo, puesto que ya se le quitó el susto cree que puede volver a ahogar en balandronadas sus propios miedos. Porque, en verdad, al revés de lo que dice, Hugo sí pierde el sueño.