Casos pendientes, por Simón Boccanegra
Al general Cruz Weffer le dieron lo suyo. Tremendo alicatazo lo sacó de donde hay. Falta por ver, como dice el editorialista de TalCual, si eso se queda así o el hombre va a juicio. De lo contrario, la lucha contra la corrupción sería puro blabla. Cuando la presión pública contra un amigo (de lo ajeno) se hace insostenible, se le saca del cargo y que se vaya a disfrutar. ¡Qué manguangua! Además, queda mucha tela por cortar. Por ahí está el caso del otro general, el de la Tercera División, quien también dejó pendientes unos chequecitos con los que según y que pagó y luego se dio el vuelto. Sin hablar de cantidad de cabos sueltos que dejó el Plan Billuyo y sobre los cuales se ha venido echando tierra con palas mecánicas. A todas estas, los arqueólogos y paleontólogos andan buscando los restos de un animal prehistórico, el clodosbalsaurio contralorensis, del cual se asegura que siendo ciego, sordo y mudo pudo sobrevivir a la catástrofe que acabó con los dinosaurios, precisamente por eso, porque nadie se daba cuenta de que estaba vivo. Tenía una gran habilidad para hacerse el pendejo y pasar agachado.