Comisión de la Verdad: Desaparición de los 43 de Ayotzinapa fue “crimen de Estado”

Los estudiantes de la escuela para maestros rurales de Ayotzinapa desaparecieron el 26 de septiembre de 2014. Según la polémica versión del gobierno de Enrique Peña Nieto, llamada “verdad histórica”, policías corruptos detuvieron a los estudiantes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que los asesinó e incineró en el basurero de Cocula y tiró los restos en el río San Juan. Los familiares y la administración de López Obrador desmienten esta versión
La desaparición de los 43 estudiantes mexicanos de Ayotzinapa fue un “crimen de Estado” en el que estuvieron involucrados autoridades de todos los niveles y no hay indicios de que estén vivos, concluyó el jueves 18 de forma preliminar la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso.
“La desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Isidro Burgos de Ayotzinapa la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 constituyó un crimen de Estado en el que concurrieron integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos y agentes de diversas instituciones del Estado mexicano”, declaró Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno, en una conferencia de prensa.
El funcionario presentó las primeras conclusiones preliminares de la comisión, creada en 2018 por el presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre el caso de los 43 estudiantes que desaparecieron en Guerrero, estado al sur de México.
El reporte está basado en más de 41.000 documentos que incluyen transcripciones de llamadas telefónicas, mensajes de texto, reportes y decenas de videos de torturas de detenidos del caso.
La comisión también concluyó “que autoridades federales y estatales del más alto nivel fueron omisas y negligentes”, incluso, las acusó de “alterar hechos y circunstancias” para establecer una conclusión “ajena a la verdad”.
“Sus acciones, omisiones y participación permitieron la desaparición y ejecución de los estudiantes, así como el homicidio de otras seis personas”, dijo Encinas sobre las autoridades, incluyendo integrantes del Ejército y de las policías locales.
El funcionario también reconoció que “no hay indicios” de que ninguno de los estudiantes esté vivo, y que “nunca estuvieron juntos” desde que los separaron en la estación de autobuses de Iguala esa noche.
Los estudiantes de la escuela para maestros rurales de Ayotzinapa desaparecieron el 26 de septiembre de 2014. Esa noche se trasladaban a Ciudad de México para participar en una manifestación por el 2 de octubre.
Según la polémica versión del gobierno de Enrique Peña Nieto, llamada “verdad histórica”, policías corruptos detuvieron a los estudiantes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que los asesinó e incineró en el basurero de Cocula y tiró los restos en el río San Juan.
La administración de López Obrador ha desmentido esa “verdad”, al coincidir con familiares y con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que señaló que los cuerpos no pudieron ser quemados en ese lugar.
Solo los restos de tres estudiantes de los 43 desaparecidos han sido identificados hasta la fecha. La Comisión de la Verdad insta a continuar la búsqueda e identificación de restos.
Con información de BBC Mundo