Cristo Presidente, por Simón Boccanegra
Ayer el presidente nos hizo una rebajita. Ya no es (al menos ayer no fue) el 2021 la meta sino el 2013. «Haré todo lo posible para gobernar hasta el 2013». Debe entenderse que «hacer todo lo posible» no sería otra cosa que ganar unas eventuales elecciones el 2006 (única manera de llegar al 2013), si es que previamente ha salido ileso de un referendo revocatorio en agosto del 2003 y si, además, antes de esta fecha no ha tenido éxito alguna de las innumerables querellas que han sido introducidas contra él en el Tribunal Supremo, en particular la que versa sobre el FIEM. Un verdadero triatlón, pues. Pero, además de este módico ajuste en sus aspiraciones, el presidente de pronto comenzó a hablar de que había encargado a alguien del mando. Todo el que lo escuchaba por radio habrá dado un respingo. Pero por la pantalla del canal 8 sí se podía ver la figura del presidente encargado. Era nada menos que Jesucristo. «Este es mi comandante», decía, en un éxtasis místico, nuestro tercio. Lo que significa que será a Cristo a quien le reclamaremos la inflación de 30% que nos vaticinó, también, el antiguo monaguillo de Sabaneta. Pendejo el muchacho.
