¿Cuántas vidas se llevará el Coronavirus?, por Cristian Silva Potellá
Una perversa energía devoradora de humanos deambula por el universo. Hasta ahora no conocemos con exactitud su origen. Sin embargo, causa extrañeza que pocas naciones donde se limitan los derechos humanos como si estaban preparadas para ello, pues poseen grandes cantidades de insumos para combatirla.
Mientras otras –desarrolladas también– entre las cuales encontramos repúblicas tan previsivas como Alemania, Italia, Francia, España, Estados Unidos de Norteamérica, se encuentran en total impavidez, por la flagrante como sorpresiva aparición del virus.
Para el momento, cuando todavía no se ha desarrollado en su máxima plenitud, se considera tan letal como la peste española, el ébola y las millonarias cifras de muertos ocasionados por la Segunda Guerra Mundial.
El autor de este artículo –ciudadano venezolano desconocedor si su pasantía terrenal terminará con el coronavirus– considera que su país lleva años batallando de pandemia en pandemia. ¿Cuáles y cuántos acontecimientos relevantes en Venezuela limitantes de la vida habrán sucedido que sus habitantes no conozcan?
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Solo que estamos llegando al paroxismo y al clímax del desvergonzado ensayo político y ensañamiento sin límites hacia una noble tierra y sus incautos ciudadanos.
¿Qué otras desgracias faltan para causar admiración a los venezolanos? Destrucción total de la economía de su país; de su sistema de salud; de los servicios básicos de agua, electricidad, teléfonos, transporte, educación, investigación técnica-científica. Infraestructura vial, agricultura. Hambruna desproporcionada, generalizada y permanente.
Destrucción del sistema financiero, bancario, industrial. Destrucción de la moneda y pérdida total de su valor adquisitivo. Ya en Venezuela no existe ningún derecho humano fundamental que no haya sido vulnerado. Daños al pulmón vegetal tan necesario para todo el planeta como el llamado “Arco Minero del Orinoco”.
¿Qué desgracia falta o faltaba en Venezuela? Bueno, el coronavirus. Y llegó de la mano de los chavistas-maduristas-socialistas; porque pobreza, miseria, abuso, violación de derechos, imposición de ruina, tristeza y muerte, solo atrae energía de la misma frecuencia y naturaleza.
Sin embargo, este aciago acontecimiento mundial se ha convertido en una excelente oportunidad para que el autoritario régimen que ya suma 21 años en el poder, pueda resarcirse ante la historia y salir por la puerta grande sin desaparecer de la escena política nacional y con grandes consideraciones humanitarias, las cuales no han tenido para nadie.
Mucho menos para los 5 millones de nuestros hermanos que ahora sufren sobremanera por los caminos del destierro y el exilio. Aprovechen la oportunidad ofrecida por los Estados Unidos –aunque intenten desconocerlo– para salir airosos, dándole una oportunidad al pueblo venezolano de encaminarse hacia la libertad, el progreso y la democracia.
No causen más sufrimiento a un pueblo, en el que todavía hay un sector importante que tiene alguna esperanza en su liderazgo por la efímera fantasía sembrada por el vendedor de ilusiones llamado Hugo Chávez.
¿Hasta cuándo seguirán con su terquedad y su afán de dominación por la fuerza?
Secretario general estado Sucre
Unidad Visión Venezuela
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