Dios los cría…, por Simón Boccanegra
Ayer Yo-El-Supremo le dio otro espaldarazo a La Hojilla. Son tal para cual, el conductor del programa estrella del canal 8 y el promotor cultural que lo aúpa. “Sigue adelante denunciando lo que tengas que denunciar,CON PLENA LIBERTAD”. Cualquiera creería que Mario Silva hace su basura cotidiana desde alguna catacumba clandestina, perseguido por la policía, eludiendo emboscadas y peligros.
Cualquiera creería que en el canal 8 sabotean a ese disidente, que la dirección de la planta lo amenaza y lo censura. Cualquiera creería que ese señor, poniendo en riesgo su vida, denuncia los ladrones y pícaros que ordeñan a la administración “socialista” ; cualquiera creería que el verbo flamígero de ese educado caballero denuncia cada día la incompetencia de la burocracia oficial; cualquiera creería que ese acucioso investigador pregunta cada día cuántos kilos de maíz o de caraotas producen los cinco millones de hectáreas que son el botín de la “guerra contra el latifundio” y cuántos campesinos han recibido aunque sea un metro cuadrado de esa tierra; cualquiera creería que el tipo pregunta qué es de la vida de los saraos y de los fundos zamoranos, cómo va la cogestión en Invepal y en la fábrica de válvulas petroleras; en fin, cualquiera creería que Mario Silva es la conciencia de la revolución.