El Aissami recibió en Maiquetía a bomberos enviados a Cuba para apagar fuego en Matanzas
El Aissami y el embajador de Cuba en Venezuela, Dagoberto Rodríguez, alabaron el trabajo de los especialistas bomberiles por su trabajo en la refinería
El ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, recibió este lunes 15 de agosto a los 43 bomberos que fueron enviados a Cuba para apagar el incendio que se registró en la refinería de Matanzas el pasado 5 y que perjudicó al menos tres depósitos de combustible.
Desde el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, El Aissami calificó de «patriotas» a los apagafuegos que fueron enviados el sábado 6 de agosto a Cuba para colaborar en las labores para apagar el fuego y que llegaron al país «sanos y salvos» con la «misión cumplida».
Envió sus palabras de solidaridad con las familias de los afectados por el incendio en Matanzas y les expresó a los bomberos que son representantes de la «Venezuela solidaria» al ir a prestar una mano a Cuba, lo que a su juicio refuerza aún más las relaciones entre Caracas y La Habana.
Resaltó que siempre prestarán ayuda a Cuba cuando lo necesite.
Por su parte, el embajador de Cuba en Caracas, Dagoberto Rodríguez, reiteró el agradecimiento de Cuba a la administración de Nicolás Maduro por el envío de esos bomberos para controlar y sofocar el fuego a «pocas horas» de haberse suscitado el incidente en la refinería.
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Aseveró Rodríguez que los enviados por Venezuela a Matanzas «quedaron en el corazón» de los cubanos.
Tras haber sofocado las llamas en la refinería, los equipos especializados de rescate en Cuba encontraron los restos de cuatro personas, presumiblemente bomberos, que estaban en la zona del desastre. Oficialmente, según las autoridades de La Habana, hay 14 personas desaparecidas.
El incendio se declaró el viernes 5 de agosto cuando un rayo impactó en uno de los ocho tanques del parque con una capacidad de almacenamiento cada uno de 50.000 metros cúbicos.
En los días siguientes las llamas afectaron a cuatro de estas infraestructuras, estratégicas para el país, provocando graves explosiones, con llamaradas de varias decenas de metros, y una columna de humo negro tóxico que alcanzó a La Habana, a 104 kilómetros.
Con información adicional de Swiss Info