El «boom» comercial llegó al sector automotor de Carabobo con el Venezuela Off-Road
Más de 300 marcas exhibieron sus ofertas de bienes y servicios durante cuatro días del Venezuela Off-Road, un evento organizado por actores privados con una inversión de $600.000 para intentar captar audiencias de la «Venezuela Premium». La cita demostró que no solo en Caracas se presentan las burbujas de hiperconsumo en un país cada vez más desigual. El panorama no fue similar para los emprendedores, quienes tuvieron que hacer una inversión cuantiosa para sus posibilidades con la finalidad de reservar un espacio pequeño y apartado del evento
Entre el jueves 17 y el domingo 20 de noviembre se llevó a cabo en San Diego, Carabobo, el Venezuela Off-Road, un festival dedicado a la exposición de vehículos todoterreno que no se hacía en Venezuela desde 2013, con eventos deportivos y conciertos que aportan un atractivo espectáculo a lo que acaba siendo un espacio para que empresas de distintos tamaños publiciten sus marcas.
Más de 20.000 personas asistieron durante los cuatro días de festival, pagando entradas válidas para cada día a un precio de $15 en preventa y de $20 en taquilla, con la expectativa de disfrutar de espectáculos como el rally de camionetas 4×4, competencias de karting y conciertos de artistas de la talla de Desorden Público, Magic Juan, La Melodía Perfecta, MoterFlowers o King Changó.
Entre espectáculos y atracciones diversas, un total de 189 empresas —entre patrocinantes y expositores—, tanto nacionales como internacionales, aprovecharon la oportunidad para captar clientes y concretar alianzas estratégicas con otras compañías, especialmente en lo que al sector automotor se refiere. Estos fueron los casos de marcas como Encava, Pirelli, Shell, Rodanol, Changan Motors, entre otras.
Por otra parte, también asistieron a la cita marcas regionales destacadas en Carabobo, relacionadas o no con la industria automotriz, como Big Cola, Stratus, Toyoval, Fonet o Domosa.
Más de 300 marcas promocionaron sus bienes y servicios en stands instalados durante los cuatro días de evento, con marcas grandes fungiendo como patrocinantes y otras más humildes pagando por los espacios. Foto: Cortesía
En medio de las marcas gigantes o tradicionales, algunos emprendimientos asomaban, la mayoría con la intención de dar a conocer la marca y vender productos para conseguir un retorno de la inversión que hicieron, pues el alquiler de los espacios para instalar stands tenía precios a partir de los $400.
El espacio de 62.000 metros cuadrados dispuesto cerca de la entrada del municipio San Diego se convirtió, durante estos cuatro días, en una meseta para el consumo, un reflejo de la reactivación económica que ha experimentado el país únicamente desde el sector comercial, lógicamente, solo al alcance de los más pudientes.
El estacionamiento habilitado para el evento estaba lleno de modelos recientes de camionetas y carros, abundaban los iPhones nuevos y comercios con precios elevados, acordes al target al cual apuntó el evento.
La cita demostró que no solo en Caracas se presentan las burbujas de hiperconsumo en un país cada vez más desigual, según alertaron investigadores del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (IIES-UCAB) en semanas recientes la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi).
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A pesar de la ilusoria percepción de normalidad que presentó el evento, el gran positivo es que, más allá del consumo, permitió evidenciar que en Venezuela las empresas empiezan a animarse a invertir y a reconquistar el mercado que perdieron con la crisis económica y la pandemia.
«El Off-Road es un portal que nos permite transmitir la calidad de nuestros productos y nos beneficia al promocionar nuestras marcas. Es una interacción directa con el consumidor final y con el retail, que se encarga de la distribución», razonó Javier Salas, Jefe de la línea Qualid de Disbattery, distribuidores oficiales de los lubricantes de marca Shell en Venezuela.
Para algunas empresas, es un escenario idóneo para establecer comunicación directa con representantes de otras compañías y entablar negocios de mutuo beneficio.
«Vienen representantes de empresas grandes. Llegar a ellos suele ser muy complicado, porque son muchos actores en el proceso. En este caso, ya llega el tomador de decisiones, el interesado final que formaliza las negociaciones», recalcó José Quintero, encargado técnico nacional de Shell.
Los patrocinantes del evento y stands expositores se enlistaron al Venezuela Off-Road con el motivo de exponer la marca a nuevas audiencias y posibles socios. La mayoría de los voceros con los que conversó TalCual relataron experiencias positivas al respecto.
«Decidimos hacer presencia en el evento y tratar de conocer a la gente, dar a conocer la marca, tratar de llegar a otros públicos. Tenemos gran presencia en el país, pero puede haber personas o mayoristas que no nos conocen. Nos han llegado casos de personas interesadas en repuestos al detal y también mayoristas. Esa es la intención de nuestra presencia en el evento», declaró Elías Chayele, representante de Moss Autoparts.
Emprendedores todoterreno
Los pesos pesados del evento no tenían de qué preocuparse. No tuvieron problemas para destacar con grandes carpas decoradas hasta el hastío, posiciones privilegiadas dentro del evento y presupuesto suficiente para contratar a promotores, animadores y organizar eventos especiales y dinámicas con los asistentes.
El panorama no fue similar para los emprendedores, quienes tuvieron que hacer una inversión cuantiosa para sus posibilidades con la finalidad de reservar un espacio pequeño y apartado del evento. En este caso, las experiencias fueron dispares y estuvieron vinculadas a problemas de organización del festival.
Neyde Ávila era una de las encargadas de velar por las ventas del puesto de Choco Churros, un pequeño emprendimiento con un local ubicado en el Centro Comercial La Granja, ubicado en Valencia, y un modesto carrito adaptado para elaborar frituras que desplazan a eventos como Venezuela Off-Road. Para el viernes por la tarde, se apreciaba su cara de desánimo, pues las ventas del primer día no fueron las esperadas y la inversión no estaba ofreciendo retorno.
«Estábamos esperando que hubiese más afluencia, pero entendemos que el primer día era un jueves y que mucha gente está en día laboral. A pesar de que queremos dar a conocer la marca, también tenemos una meta de ventas. En comparación, participamos en la ExpoValencia y la verdad nos fue muy bien allá», relató.
Dos días más tarde, durante la tarde del domingo, el panorama para Ávila era distinto. En ese momento, con clientes sentados en las mesas que habilitaron consumiendo sus churros, comentó que durante sábado y domingo les había ido mucho mejor y alcanzaron sus metas de venta.
Un caso similar fue contado por Eneida Rumbos, dueña de un carrito de bebidas naturales heladas que reluce una marca de nombre Frappea2, quien inicialmente expresó su desilusión con el evento. Fue posicionada en el espacio de los conciertos, pero muy alejada de la tarima y frente a puestos de bebidas alcohólicas. No podía competir.
«Siempre que voy a este tipo de eventos le digo a mi hijo, cuando me pregunta cómo le fue, que no era lo que esperaba, incluso aunque me hubiese ido bien. En este caso, de verdad no era lo que esperaba. Tengo la esperanza de que mejore el fin de semana, porque esta es una inversión y estamos perdiendo dinero», afirmó.
Dos días más tarde, el domingo, Frappea2 se ubicaba en otro espacio del evento, frente a un área de karting muy frecuentada por menores de edad. Sin competir con las bebidas alcohólicas y con niños merodeando, las ventas de sus frappés se dispararon. El semblante de Rumbos era de felicidad. También había logrado recuperar su inversión.
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La historia de Carla Nieta, en contraste, fue positiva desde el inicio. Junto a su esposo, manejan una distribuidora de cigarrillos electrónicos llamada Vaping Zone. Hicieron una inversión de $750 para instalar un stand de 6×2 metros y, pese a problemas de logística por parte de los organizadores del Off-Road, desde el primer día consiguieron clientes.
«Tuvimos una respuesta increíble de la gente. Nos ha ido increíble. Esperábamos darnos a conocer y no tener tantas ventas, pero hemos tenido ventas y nos hemos dado a conocer. De los expositores, ya tenemos a varios a los que les estamos vendiendo al mayor y que pusieron nuestra marca en el Off-Road», explicó.
Esperanzas en el Venezuela Off-Road
Estas historias dan fe de que muchos venezolanos están encontrando la manera de emprender y salir adelante con las posibilidades que tengan en el contexto económico actual, a pesar de que este boom de consumo en las principales ciudades del país no tenga mayor tracción económica y no solucione los problemas de fondo.
Esta realidad es la que avizora el propietario de VeneOff, empresa encargada de organizar las ediciones de Off-Road en Venezuela, Demetrio Ziangos, quien considera que el evento evidencia la existencia de un mercado desasistido que requiere de emprendimientos e inversión para ser atendido.
No en vano, esta iniciativa privada invirtió alrededor de $600.000 para generar este ambiente propicio para fomentar las operaciones empresariales e incentivar la inversión en un sector automotriz que afronta una crisis importante.
«El evento es una radiografía de cómo está el país. Hay mucha gente con emprendimientos de todo tamaño y un mercado que estaba desasistido. Nos abrimos a una exposición comercial y tenemos a empresas de muchos rubros participando. Se convirtió en una vitrina comercial», aseguró a TalCual.
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Destacó además que la convocatoria no solo fue una oportunidad para las empresas que asistieron al evento, sino que permitió articular a todo el sector comercial y productivo del municipio, pues diversas empresas fueron contratadas para apoyar con la logística y la organización del Venezuela Off-Road, así como para entregar pedidos especiales a las empresas participantes.
«Valencia se mueve muchísimo. Muchas empresas fabrican cosas. Todas las empresas de la zona estuvieron a tope, entregando a nuestros clientes todo lo que les pidieron las empresas exponiéndose. El evento es una exposición nacional», destacó.
